El cura abulense sustituye al que ha sido responsable regional desde 2013, Lucio Arnáiz, de la diócesis de Alicante
El abulense Diego Martín Peñas ha sido elegido nuevo responsable regional de la Asociación de Sacerdotes del Prado. Será el encargado de coordinar esta asociación en España, durante los próximos cinco años. La elección ha tenido lugar en el transcurso de la asamblea que estos sacerdotes celebran en Ávila, del 23 al 27 de enero. Diego Martín tiene 56 años de edad y es sacerdote de la diócesis de Ávila.
Una vez elegido mediante votación, los responsables del Prado han llamado al administrador apostólico de Ávila, el obispo emérito Jesús García Burillo, para que concediera el plácet, sin el cual Martín Peñas no podría asumir el cargo.
Diego Martín sustituye al que ha sido responsable regional desde 2013, Lucio Arnáiz, de la diócesis de Alicante. Desde este momento se inicia un proceso de relevo en la dirección de esta asociación en España, que contará, además con el nombramiento de un equipo de consejeros, que saldrá también de esta asamblea celebrada en Ávila.
No es el primer cargo de responsabilidad que Diego Martín tiene en la Asociación de Sacerdotes del Prado. Actualmente es miembro del Consejo Regional y responsable de formación. Además, en el equipo que dirige la asociación a nivel internacional, es miembro del Consejo General.
Los sacerdotes que forman parte de esta asociación en España se encuentran reunidos en asamblea durante esta semana. Se trata de una asamblea que se celebra cada 5 años, en la que se proponen las líneas de acción para el siguiente quinquenio y en la que se elige al responsable de la asociación para esos años. En esta ocasión, se han reunido en la ciudad de Ávila, en el CITeS, el Centro Internacional Teresiano Sanjuanista, desde el 23 al 27 de enero.
En Ávila se han reunido más de 70 sacerdotes de toda España. Asisten también el responsable general, el italiano Armando Pasqualotto, y miembros de los Prados regionales de Francia e Italia. En el mundo, esta asociación, que nació en Francia a finales del siglo XIX de la mano del beato Antoine Chevrier, está presente en 40 países y cuenta con sacerdotes, diáconos, seglares, religiosas y laicas consagradas. El estudio del Evangelio, el amor a la Eucaristía y el compromiso por la evangelización de los pobres desde una opción de pobreza, son algunos de los distintivos que marcan el carisma de los Sacerdotes del Prado.