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El gobierno de Nicaragua prohibe los oficios de Cuaresma y Semana Santa en las calles

De acuerdo con algunos sacerdotes y fieles, en caso de faltar a esta indicación, el gobierno les cerraría los templos





El gobierno de Nicaragua estaría prohibiendo que las procesiones católicas de Cuaresma y Semana Santa se lleven a cabo en las calles, según han reportado varios medios de comunicación locales. Y es que si bien no hay al momento un comunicado oficial, tanto fieles como sacerdotes han dicho que la indicación es celebrar los oficios religiosos solamente en los templos.



De acuerdo con un sacerdote entrevistado por la Voz de América, la Policía Nacional, dirigida por Francisco Díaz, consuegro del presidente Daniel Ortega, le notificó verbalmente la prohibición sin dar más explicaciones.

El mismo medio de comunicación destacó lo dicho por la investigadora del Observatorio Pro Transparencia, Ana Patricia Molina, quien dijo: “las prohibiciones de las actividades de piedad popular que se realizan durante la Cuaresma es una agresión más a la Iglesia católica nicaragüense y a la libertad religiosa de todos los ciudadanos”.

Molina destacó que la Iglesia católica “es la única institución creíble, respetada y amada que a la luz del evangelio está anunciando y denunciando todas las arbitrariedades y maldades que comete la dictadura”, por lo que consideró que esta prohibición “es sin duda dolorosa para todo el pueblo católico que por siglos ha celebrado la Cuaresma”.

No salir del templo

De acuerdo con información recabada por otros medios de información, en la diócesis de Matagalpa se realizarán los ‘viacrucis’ al interior del templo; de hecho, la presencia policiaca en los alrededores continúa a raíz de la detención, en agosto de 2022, de su obispo Rolando Álvarez, recientemente sentenciado a 26 años de prisión.

Testimonios anónimos señalan que en las localidades de Masaya, Managua, Carazo, Jinotepe, Diriamba, así como en la diócesis de León y Chinandega, sus sacerdotes les han dado la misma indicación verbal de “no salir del templo”, pues de lo contrario les cerrarían la parroquia.

Cabe señalar que desde el año pasado el régimen sandinista, a través de la Policía Nacional, prohibió las procesiones de las festividades de San Miguel Arcángel y San Jerónimo en la ciudad de Managua, argumentando “razones de seguridad pública”.

Recientemente, el presidente Daniel Ortega dijo en un acto público, que nunca tuvo “ni cariño ni respeto a la mayoría de los sacerdotes y obispos“; además, cuestionó la manera en que se elige al Papa: “tendría que haber una votación en el pueblo católico para que también se elija al Papa, que sea el pueblo que decida y no la mafia que está organizada allí en el Vaticano”.

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Alicia Ruiz López de Soria, ODN







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