El Papa ha recibido hoy los feriantes y trabajadores del circo de Italia, entre ellos, la religiosa francesa Geneviève Jeanningros, a la que cantó por su 80 cumpleaños
Rompiendo todo protocolo establecido. Así arrancó esta mañana la audiencia del Papa a la Unión Nacional de Atracciones Ambulantes en la Sala Clementina de los Palacios Apostólicos. ¿El motivo? Entre los participantes se encontraba una más que vieja conocida de Francisco: sor Geneviève Jeanningros, una monja francesa entregada a la pastoral circense y que casi semanalmente acompaña a transexuales para que conozcan a Bergoglio.
Sabedor de que era un día especial para ella, no dudó en comenzar su alocución así: “¿Podéis cantar? Para mostrar vuestros deseos, ¿qué cantáis? ¡Desead lo mejor cantando, porque la hermana Geneviève, tiene 80 años! ¿Cantamos su “feliz cumpleaños”?”.
Tras este momento de distensión, se dirigió a los trabajadores presentes para empatizar con las dificultades que han atravesado durante la pandemia porque vieron frenada en seco su labor. “Ahora, gracias a Dios, has podido reanudar. La Iglesia sigue acompañándoos, anunciándoos a Cristo Salvador, que recorrió las ciudades y las aldeas, llevando a todos el anuncio gozoso del Reino de Dios”, les compartió el Papa.
A feriantes y personal del circo, les recordó que cooperan “en un sentido amplio en el anuncio del Evangelio por la alegría que traéis a la gente con vuestras atracciones”. “Sois sembradores de sonrisas y de alegría, ¡no lo olvidéis!”, les elogió, a la vez que les invitó a estar “abiertos a una perspectiva de fe, que nace del encuentro con Jesús, presente y activo en su Iglesia”.
Para Francisco, “el sentido de alegría y celebración que difundís brota de la creatividad y la imaginación, no sigue los modelos artificiales y conformistas que circulan en los medios de comunicación”. Así, reivindicó “la sencillez y autenticidad que se respira en un parque de atracciones” frente a “un clima gris y pesado”. Es más, aplaudió la “diversión al aire libre y en compañía”, frente a lo opuesto a lo que vemos cada vez más a menudo hoy en día, cada uno solo con su teléfono móvil o computadora, lo que lo aísla”. Por todo ello, reivindicó el ocio que pasar por “salir, reunirse en la plaza y divertirse juntos”.