Una delegación de Mediterranea Saving Humans –entidad dedicada a organizar equipos de rescate en el Mediterráneo– acompañados por el cardenal siciliano Franco Montenegro y los arzobispos de Palermo y Nápoles, Corrado Lorefice y Mimmo Battaglia, han sido recibidos en audiencia por el papa Francisco. Una cita que ha contado con la presencia del cardenal Michael Czerny, Prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral.
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Amor entrañable
“Hemos agradecido al Papa su acompañamiento y el de la Iglesia”, ha señalado el capellán de esta oenegé, Mattia Ferrari, al diario ‘Avvenire’. La entidad compartió la labor que realizan en el Mediterráneo central en colaboración con las archidiócesis de Palermo y Nápoles y otras Iglesias locales del entorno.
Los rescatadores hablaron al Papa del “amor entrañable, ese amor que caracteriza el corazón de Dios, el corazón de Jesús, y que toda persona es capaz de sentir”, según Ferrari. “Ese amor entrañable que nos lleva a actuar en el Mediterráneo y en Ucrania”, añadió el capellán ya que la organización forma parte de la red de movimientos populares de todo el mundo y tiene proyectos sobre el terreno en Ucrania.
Por parte de Mediterranea asistieron la presidenta Vanessa Guidi, con Luca Casarini, Alessandro Metz, Beppe Caccia, el comandante del barco Mare Jonio, Giovanni Buscema, la jefa de misión Sheila Melosu, y la jefa de misión en Ucrania, Laura Marmorale. La delegación le regaló al Papa una representación moderna del pescador san Erasmo con chaleco salvavidas y dos remos.
