El primer sacerdote en participar en el programa en sus diez años de emisión ya ha bendecido el plató en el que fusionará “la cocina con la predicación”
Un sacerdote por primera vez en los diez años de historia de MasterChef. El dominico fray Marcos Julio García Sánchez (Mérida, 1978) es uno de los 23 participantes del programa estrella de RTVE, que estrenó anoche su décimo primera edición siendo líder de audiencia pese a haber sido el estreno menos visto.
Licenciado en Filosofía, en Comunicación Social y en Teología, es miembro del equipo de promoción vocacional y juvenil en el vicariato de la Provincia de Nuestra Señora del Rosario en España desde enero de 2020, cuando llegó a nuestro país. En Venezuela y Colombia fue profesor en varios colegios, además ejerció también la docencia en la Universidad Santo Tomás en Bogotá y Medellín. Así, tiene un proyecto de predicación a través de redes sociales llamado ‘Mi amigo el fray’, y solo en Instagram cuenta con más de 10.000 seguidores.
“Por estar aquí, ya soy un ganador, aunque no entre”, dijo a los jueces antes de presentar el plato de pollo con el que se hizo con el delantal blanco gracias al sí de Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez y pese al voto contrario de Jordi Cruz. “Quiero dedicárselo a Dios y a la santísima Virgen, que son mis compañeros”, completó.
¿Cuál es su objetivo tras su paso por el programa? “Fusionaría la cocina y la predicación en un proyecto que se llamaría ‘Predicocinando’. Lo haría en YouTube y en las redes sociales”, expresó al ser preguntado al respecto y tras animarse hasta a cantar un bolero. Y, ¿por qué se ha presentado al casting? “Santa Teresa de Jesús, doctora de la Iglesia, decía que en los pucheros y en las ollas también está Dios”, advirtió.
En la prueba final, el religioso no pudo evitar las lágrimas: “Vengo de Venezuela, donde ayudo a las dominicas venezolanas que tienen ancianatos y orfanatos. Ahora, desde MasterChef quiero ayudar a la sociedad materialmente y a través de la esperanza”.
Acompañado por todos sus compañeros y tras la petición de Pepe Rodríguez, fray Marcos bendijo el plató: “Que Dios todopoderoso bendiga este escenario, a los participantes y al equipo que está detrás de cámaras con gozo y enamorados de su trabajo. En nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”. Amén.
Como ha afirmado el propio fray Marcos a los redactores del programa, su plato estrella es el pabellón criollo, aunque confiesa que su tortilla de patatas es espectacular. ¿Ganará con uno de los platos más tradicionales de la cocina venezolana?