La Iglesia española es hoy por hoy la mayor empleadora de nuestro país, solo por detrás de las diferentes administraciones públicas del Estado. El número de funcionarios en España se sitúa ya en 2.731.117, mientras que las diferentes plataformas, de diócesis a congregaciones, pasando por otras instituciones con el apellido católico, generan al menos unos 600.000 empleos directos, tal y como ha podido corroborar Vida Nueva a través de diferentes fuentes eclesiales.
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“No se trata de una cifra exagerada, ni mucho menos”, exponen desde el Episcopado español, conscientes de que hasta la fecha no se puede afinar más esta cifra ni se ha realizado ningún informe que recoja todo este espectro más allá de los datos que se ofrecen en la Memoria de Actividades de la Iglesia, que cada año presenta la Conferencia Episcopal Española.
“No es exagerado decir que la Iglesia es el empleador más importante de España en un sentido mercantil amplio, con unas métricas directas e inapelables”, sostiene Guillermo García Díaz-Ambrona, consultor en el Área de Responsabilidad Social Empresarial. Eso sí, añade que quizá no se perciba como “motor de empleo” en un ranking debido a que “la unidad de mando es más difusa porque no hay un único consejo de administrador”. “No es un demérito estar descentralizado, sino que habla de una diversidad que enriquece con un mismo hilo conductor, bajo un mismo paraguas”.
Empleos directos, indirectos e inducidos
En cualquier caso, los puestos de trabajo dependientes de la Iglesia estarían muy por delante de los que sostienen las principales empresas de nuestro país. La economía española cuenta con un total de 171 empresas con más de 5.000 empleados. El ranking de las compañías con más plantilla está encabezado por Grupo ACS, Mercadona y El Corte Inglés, según los datos oficiales más recientes publicados por las propias empresas. ACS, líder en el sector de la construcción, paga el sueldo a 122.502 personas, mientras que la mayor cadena de distribución de marca blanca capitaneada por el valenciano Juan Roig cuenta hoy por hoy con 99.000 empleados. Por su parte, El Corte Inglés suma 79.800 trabajadores.
Del estudio anual de los obispos más reciente publicado en 2022, con auditoría de transparencia de por medio, sí se desprende que solo las diócesis y parroquias emplean a 64.925 personas. Además, a través del patrimonio cultural se sostienen 225.000 empleos directos, indirectos e inducidos, y las fiestas religiosas generan 134.000 empleos directos, indirectos e inducidos.
Enseñanza y turismo
De la misma manera, también se contabilizan hasta 133.770 trabajadores en 2.558 centros católicos de enseñanza infantil, primaria y secundaria. Para hacerse una idea, según la lista del Portal Oficial de Turismo de España, dos de los tres monumentos más visitados de España pertenecen a la Iglesia. Solo por delante de la Basílica de la Sagrada Familia de Barcelona y de la Catedral Mezquita de Córdoba se sitúa la Alhambra de Granada, que fue el monumento más visitado a nivel nacional durante el año 2022, con un total de 2,3 millones de visitantes.
“Se podría hablar de un efecto derrame, es decir, de que el impacto de la Iglesia va mucho más lejos de lo que supone firmar un determinado contrato de trabajo. Basta con imaginarnos todo lo que se ha movido de forma indirecta en las procesiones de esta Semana Santa que acabamos de vivir. No vale con un simple sumatorio de empleos”, aprecia García Díaz-Ambrona.
Sin embargo, hasta la fecha, no se tenía constancia de cuántos contratos están ligados a las 15 universidades católicas de nuestro país. Tras consultar a cada uno de estos centros de formación, Vida Nueva calcula hasta 22.000 entre docentes y personal de administración y servicios. Al frente de este conglomerado se encuentra la Universidad de Navarra, con 6.308 trabajadores. Pero no menos significativa es la presencia de la Universidad Católica de Ávila. Con alrededor de 800 empleados, es la empresa con más trabajadores de la provincia, por encima de referentes locales como Plastic Omnium o Nissan.
Ámbito sanitario
En cuanto a la actividad sociosanitaria de la Iglesia, a falta de una radiografía minuciosa de la federación de religiosos del ramo, solo Hospitales Católicos de Madrid cuenta con siete centros que emplean a casi 2.900 personas, de las que 1.054 son personal facultativo, 1.246 pertenecen al ámbito asistencial y 597 corresponden a otros servicios.
Por su parte, Centros Socio-Sanitarios Católicos de Catalunya tiene asociados 54 centros agrupados en 19 congregaciones religiosas, 10 fundaciones y dos asociaciones. Entre residencias geriátricas, centros para disminuidos, casas de acogida de madres solas con sus hijos, comedores sociales, residencias sociosanitarias, servicios de atención domiciliaria, centros de día y centros psiquiátricos suman 1.462 empleados en régimen general, 88 autónomos y 207 subcontratados.
En la Memoria de Actividades también se incluyen los datos de Cáritas con sus 5.324 trabajadores, unos profesionales que dan empaque a la principal ONG eclesial junto al ejército de 81.182 voluntarios para 5.402 centros y servicios. Aunque, más allá, no se incluyen los datos de otras entidades del tercer sector como Manos Unidas, Ayuda a la Iglesia Necesitada y otras fundaciones de carácter social y benéfico ligadas a congregaciones religiosas o movimientos.
