La Unión de Superiores Generales abrirá una consulta en su próxima asamblea general para fusionarse con la Unión Internacional de Superioras Generales
Monjas, por un lado. Frailes, por otro. Hasta la fecha, la Iglesia católica cuenta con dos plataformas diferentes a escala universal que representan por separado a las congregaciones masculinas de las femeninas. La Unión de Superiores Generales (USG) frente a la Unión Internacional de Superioras Generales (UISG).
Esta división estructural podría tener los días contados. Al menos, el debate ya está encima de la mesa. De hecho, la Unión de Superiores Generales lo ha incluido en el orden del día de su próxima asamblea general, la número 99, que se celebrará del 24 al 26 de mayo bajo el lema tomado de la primera carta a Timoteo: ‘¡Reaviva el carisma de Dios que está en ti!’.
Será en la etapa final de este foro de encuentro, en la mañana del 26 de mayo, cuando reunidos en plenaria, los responsables de las órdenes, congregaciones e institutos de vida consagradas masculinas celebren, tal y como recoge el orden del día, una “consulta sobre la posibilidad de convertirse en una sola unión” con la Unión Internacional de Superioras Generales.
Además, tal y como anuncia el presidente de la Unión de Superiores Generales y prepósito de los jesuitas, Arturo Sosa, la asamblea general número 100 que se celebrará en noviembre “se desarrollará conjuntamente” con la Unión de Superioras Generales de manera presencial”. No se trata de la primera vez que comparten reunión, en tanto que ya tuvieron una experiencia similar en la asamblea online que convocaron en mayo de 2021.
Lo cierto es que este paso vendría a responder a la fusión que desde hace décadas vienen haciéndose en diferentes países. Por ejemplo, en España. En 1953 nació la Conferencia Española de Religiosos con dos secciones, masculina y femenina. Sin embargo, a partir de 1968 se instituyeron en dos organismos autónomos e independientes diferenciadas entre hombres y mujeres. Fue en 1994 cuando CONFER se consolida como una realidad única y sin bicefalias.
En Estados Unidos, coexisten por separado las plataformas masculina y femenina. Por un lado se encuentra ‘The Conference of Major Superiors of Men (CMSM)’ frente a ‘The Leadership Conference of Women Religious (LCWR)’.