En 1987, el padre Pilón, jesuita, fundó el Grupo Hepta, aún en activo, con el cometido de investigar los fenómenos paranormales que surgieran en España. Hasta entonces no lo estaba haciendo nadie, y, para ello, fue reclutando a personas que tuvieran las mismas inquietudes.
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Entre las personas reclutadas por el jesuita se encontraban Sol Blanco-Soler, Piedad Cavero y Paloma Navarrete. Ahora, Netflix ha llevado su historia al cine con ‘Fenómenas’, una película en la que el director Carlos Therón combina el terror con el humor para relatar uno de los casos más conocidos de los investigados por el grupo: el del poltergeist de ‘El baúl del monje’, una almoneda madrileña.
En estos casi 30 años, el Grupo Hepta ha continuado su labor de investigación de forma, tal como subrayan en su web, totalmente altruista. “No existen ayudas ni subvenciones a este tipo de trabajo. La investigación que Hepta realiza tiene que adecuarse a los medios que pueden sufragar los integrantes del equipo. El Grupo Hepta es altruista y sólo acepta, por parte de los que acuden a él, la ayuda en gastos que se puedan generar en los traslados”, explican.
¿Quién fue el padre Pilón?
José María Pilón, fallecido en 2012, se definía a sí mismo como radiestesista, y organizó y participó en numerosas conferencias, ciclos y seminarios sobre parapsicología, como las Jornadas de Parapsicología que se celebraban en la Casa Profesa de los Jesuitas (situada en la calle Serrano de Madrid).
Su intervención en la investigación de diversos fenómenos paranormales, así como en casos de desapariciones, le valieron un rápido reconocimiento a nivel nacional e internacional.