Las obras en el templo, tal como ha señalado el sacerdote, podrían durar hasta seis años
Cuando el sacerdote redentorista Michael Cusack se acercó a Vincent y Adrienne Clarke para pedirles que le permitieran celebrar misa en el pub irlandés que regentan en Luxemburgo, creyeron, tal como recoge The Irish Mirror, que era una broma. Sin embargo, se trataba de una petición real para dar respuesta a la necesidad que había surgido en su comunidad de tener un lugar donde llevar a cabo las celebraciones debido a que su parroquia se encontraba en obras.
El redentorista instaló, así, su altar en el pub durante dos semanas, para celebrar la eucaristía del domingo a la que asistieron unas 250 personas. Sin embargo, las obras, tal como revela el sacerdote, podrían alargarse hasta seis años.
“Estoy viviendo en un monasterio redentorista, pero la Iglesia ha sido cerrada por reformas por parte del Estado”, dijo el religioso, originario de Irlanda pero asentado en Luxemburgo. “En este momento hay arqueólogos allí tratando de descubrir si hay murallas debajo de la Iglesia y estas exploraciones deben llevarse a cabo antes de las obras”. Por este motivo, el cierre “significó que fuimos desplazados”.
“Pasamos dos fines de semana en un pub irlandés, gracias a Vincent y Adrienne Clarke, quienes afortunadamente me abrieron las puertas a mí y a nuestra comunidad. Tuvimos misa allí durante dos domingos y luego, creo que fue suficiente para avergonzar a la diócesis y tratar de encontrar un nuevo lugar para nosotros”, ha explicado.
Asimismo, el cura ha explicado que ahora mismo se encuentran en tres iglesias en Luxemburgo. Sin embargo, lamenta que no tienen “un lugar al que llamar nuestro y parece que eso podría durar hasta seis años”.