La vida de Marta Obregón, y su muerte, no deja indiferente. Esta joven que frecuentaba un centro del Opus Dei en Burgos y que fue asesinada por el conocido como violador del ascensor el 21 de enero de 1992, ha recibido un nuevo impulso. Este 5 de mayo de 2023, en el Dicasterio de las Causas de los Santos del Vaticano ha tenido lugar el acto de apertura de las cajas de las Actas del proceso diocesano de la Causa de beatificación y canonización de Obregón, por vía de martirio.
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Una gran investigación
Este paso, para la postulación, “marca la reanudación de la investigación en profundidad que se realiza en esta segunda fase”. Los documentos han sido entregados por Cristiana Marinelli, el sacerdote postulador de la fase diocesana Saturnino López, y Carlos Metola, representante del Camino Neocatecumenal que promueve esta investigación. “Marta Obregón, era una joven alegre, con gran vitalidad, que pertenecía a una comunidad neocatecumenal de la parroquia de San Martín de Porres de Burgos. Era una de las salmistas de su comunidad”.
Estudiante de periodismo y con miras puestas en ser misionera, en una fría noche de enero fue abordada en el portal de su casa, raptada y llevada brutalmente a un descampado, fuera de la ciudad, para ser apuñalada por su asesino. Antes de este final, defendió la virtud de la castidad de forma heroica, hasta la muerte. La causa de Marta comenzó en 2011 y Saturnino López ha recogido en el libro ‘Marta Obregón. Hágase. Yo pertenezco a mi amado’ distintos testimonios y documentos de la vida de una joven “espontánea, alegre, comunicativa, deportista y, sobre todo, llena de inquietudes espirituales”.
