El líder de los obispos japoneses y secretario general de los Episcopados asiáticos llevará el timón de la oficina central de la plataforma social de la Iglesia
Un japonés, al frente de la principal plataforma social de la Iglesia y, por tanto, de su rostro más visible ante la opinión pública. El arzobispo de Tokio, Tarcisius Isao Kikuchi, fue elegido este sábado presidente de Cáritas Internationalis durante la Asamblea Plenaria que se celebra en estos días en Roma.
Su designación llega en un momento crucial para la entidad, en tanto que tiene lugar seis meses después de que el Papa Francisco despidiera en bloque a toda la cúpula, incluido el presidente, el cardenal Luis Antonio Tagle. ¿El motivo? Tal y como pudo confirmar Vida Nueva de fuentes vaticanas, no se trataba de problemas financieros que escondieran algún tipo de corruptela, sino más bien “una errada gestión del equipo con tintes autoritarios” por parte del hasta entonces secretario general, el francés nacido en India, Aloysius John.
En este tiempo, el pontífice argentino apostó por dejar Cáritas Internationalis de un comisario extraordinario, el italiano Pier Francesco Pinelli, que ha estado acompañado en esta fase por la española Amparo Alonso y el jesuita portugués Manuel Morujão. Durante la apertura de la actual Asamblea, el Papa en persona quiso explicar su intervención directa para “favorecer la propuesta de renovación de la institución”.
Ahora serán ellos los que hagan el traspaso de poderes al arzobispo Kikuchi, que actualmente es el presidente de la Conferencia Episcopal de Japón y secretario general de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC).