El cardenal secretario de Estado presentó un libro en Venecia con material de archivo del Papa de la sonrisa
Parolin destacó, citando palabras del papa Francisco, que “Luciani pudo dirigir una mirada profética sobre las heridas y los males del mundo, mostrando hasta qué punto la paz es querida en el corazón de la Iglesia”. Para el cardenal, junto al compromiso ecuménico e interreligioso, el discurso programático del Juan Pablo I se basó en la tarea de fomentar la reconciliación y la fraternidad entre los pueblos, llamando a la colaboración para “proteger y acrecentar la paz en este mundo convulso” y frenar la “violencia ciega que sólo destruye y siembra ruina y luto”, señaló el Secretario según recoge L’Osservatore Romano.
Para el Secretario de Estado destaca especialmente su actividad de promoción de la paz, llegando a mediar en una disputa fronteriza entre Argentina y Chile o apoyando las conversaciones de Camp David de Jimmy Carter sobre el conflicto entre Israel y Palestina. “No tenemos soluciones milagrosas para los grandes problemas mundiales. Sin embargo, podemos aportar algo verdaderamente precioso: un espíritu que ayude a desentrañar estos problemas y a situarlos en su dimensión esencial, la de la caridad universal y la apertura a los valores trascendentes…” son palabras del papa Luciani en una audiencia rescatadas por Parolin. Un Papa que reclamaba que “la Iglesia, humilde mensajera del Evangelio a todos los pueblos de la tierra, pueda contribuir a crear un clima de justicia, fraternidad, solidaridad y esperanza sin el cual el mundo no puede vivir”.