Parece que no han saltado las alarmas en la sede de la Conferencia Episcopal Portuguesa tras la cirugía a la que ha sido sometido este miércoles, 7 de junio, el papa Francisco. Los obispos lusos se muestras “confiados” en la recuperación del pontífice, si bien apunta que el cumplimiento del programa anunciado en estos días “depende” del estado de salud del Papa.
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Sin alternativas
“El programa es el que está fijado” y “no tenemos otro programa”, pero “evidentemente que esto depende de las condiciones de salud del papa y esperamos con confianza y rezamos”, ha señalado a los periodistas el presidente del episcopado, José Ornelas, en declaraciones recogidas por la agencia Efe. El obispo ha reconocido que conocía el hecho de que el Papa había ido al hospital, pero no del particular de la operación a la que ha sido sometido.
Hasta que el próximo 1 de agosto ponga rumbo a Lisboa para participar en la JMJ el Papa tiene tiempo para recuperarse. “No hay un plan B, nuestro único plan es F, de Francisco”, reclamó el presidente de la Fundación JMJ 2023, Americo Aguiar, ante los rumores de posibles alternativas a una jornada sin el pontífice. Hasta ahora solo se han suspendido algunas de las celebraciones más inmediatas como la presidencia de la misa del Corpus el próximo domingo.
