“La jornada del papa Francisco fue tranquila, con el curso clínico esperado”. Así de contundente se muestra el comunicado lanzado por la Oficina de Prensa de la Santa Sede a las 19:15 h. de este lunes, 12 de junio. Desde el Vaticano se informa también que, por la tarde, el pontífice se dedicó a las actividades laborales, a la lectura de textos y al descanso. Francisco también “se recogió en oración en la pequeña capilla de su apartamento privado” al final de la tarde.
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Evolución normal
Esta comunicación sigue a las anteriores informaciones del personal médico que asiste al papa Francisco tras la operación en el Policlínico Gemelli de Roma efectuada el pasado miércoles, 7 de junio. Antes del último comunicado, al final de la mañana del lunes 12 de junio se apuntaba que “el papa Francisco continúa alimentándose con normalidad. Esta mañana, ha recibido la Santa Eucaristía y después se ha dedicado a sus actividades laborales”.
Antes, el pasado domingo 11 de junio, solo se distribuyó un comunicado en el que se apuntaba a la “regularidad” con la que el Papa –que no rezó de forma pública el ángelus– iba respondiendo a su recuperación tras la operación de una hernia por laparoscopia. El domingo también se informó que Francisco comió casi en familia con quienes le asisten en estos días de hospitalización: médicos, asistentes sanitarios, enfermeros, auxiliares y gendarmes. Antes se habían destacado que el Papa continuaba “apirético y hemodinámicamente estable” y que se había “sometido a fisioterapia respiratoria” y que seguía “movilizándose”.
