Erradicar la cultura del abuso de la Iglesia. Este ha sido el desvelo del papa Francisco desde que, tras su viaje a Chile en enero de 2018, su perspectiva sobre la crisis de los abusos cambiara por completo. ¿Los ‘culpables’? Dos nombres propios: la vaticanista de Associated Press, Nicole Winfield, y el hoy miembro de la Pontificia Comisión para la Protección de Menores Juan Carlos Cruz.
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La primera, porque en ese mismo viaje de regreso a Roma tuvo el atrevimiento de decirle que se estaba equivocando en su juicio sobre la magnitud del problema en el país. El segundo, porque le hizo llorar escuchando el horror de su relato. Esto le llevó a enviar a Charles Scicluna, arzobispo de Malta, junto al español Jordi Bertomeu, oficial del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, hasta allí para investigar lo sucedido. Tras su informe, escribió una carta en la que constaba que “la cultura del abuso y del encubrimiento es incompatible con la lógica del Evangelio”. Acabar con la que el Pontífice no ha dudado en llamar “cultura de la muerte” pasa por la formación, para prevenir y que no vuelvan a sucederse los casos.
En este sentido, según datos hechos públicos por la Conferencia Episcopal Española, 103.000 niños y más de 20.000 profesores han recibido formación sobre protección de menores, ya sea sobre bullying o abusos sexuales. Pese al notable avance de la Iglesia española en esta materia, sobre todo en los últimos cinco años –con la apertura de más de 200 oficinas de protección de menores en diócesis y congregaciones–, la realidad es que, según ha podido saber Vida Nueva, menos del 14% de los sacerdotes han recibido formación específica en este sentido en nuestro país. En concreto, se han formado alrededor de 2.200 presbíteros de los 16.126 que hay hoy en España si echamos mano de la última Memoria anual de actividades de la Iglesia católica en España, presentada en mayo de 2023, con datos de 2021.
Sensibilizar y prevenir
En otras palabras, más del 86% del clero no se ha instruido en la materia cuando el Episcopado acaba de reconocer en junio –en el ‘Informe Para dar luz’ presentado en el marco de la Jornada Protección de menores: seguimos caminando–, al menos, 927 víctimas de 728 sacerdotes abusadores, siendo perpetrados los abusos en un 75% de los casos antes de los 90. Sin embargo, estos datos se irán actualizando. De hecho, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión Permanente el 28 de junio, el secretario de los obispos, César García Magán, confirmó que la auditoria antiabusos encargada al bufete Cremades&Calvo Sotelo será presentada en septiembre.
