Jesús Rico ya es obispo de Ávila: “Dejemos de lado rencillas y divisiones”

Jesús Rico ya pastorea oficialmente la diócesis de Ávila. El operario diocesano de 68 años que hasta ahora era el rector del Colegio Español en Roma ha sido ordenado hoy en una eucaristía celebrada en la catedral abulense, de manos el ex presidente de la Conferencia Episcopal, el cardenal Ricardo Blázquez. Con un templo repleto de fieles, Rico estuvo arropado además por medio centenar de prelados, con el nuncio Bernardito Auza al frente.

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“La Iglesia está llamada a ser comunidad y no una comunidad cualquiera, sino al estilo de Dios Uno y Trino, unidad en la diversidad, sin guerras mutuas, capaz de dejar de lado rencillas y divisiones, comunidad de fe y amor donde el servicio a la caridad lo invade todo”, expuso Rico durante la acción de gracias antes de finalizar la misa. El nuevo obispo detalló la urgencia de una “revitalización de nuestras comunidades”, que para él “no es cosa de estrategias pastorales, sino de comunión con Cristo”.

Compartir carismas y ministerios

Con su madre presente en la primera fila, el nuevo obispo insistió en que “necesitamos sentirnos Pueblo de Dios, caminar juntos, como comunidad, compartiendo carismas y ministerios”. En su alocución incluyó referencias a Pablo VI, Benedicto XVI, Francisco, al Concilio Vaticano II y al fundador de los operarios, el beato Manuel Domino y Sol, expuso que “la renovación de la Iglesia, solo vendrán de las fuerzas de aquellos que tienen raíces profundas”.

“Nos toca sembrar, salir sin miedo al encuentro del hombre con la Buena Nueva, fuente de plenitud y fidelidad”, expuso Rico, convencido de que “la comunidad cristiana es misionera por naturaleza”. “Evangelizar hoy en medio de una cultura de la indiferencia y la increencia es el reto que tenemos planteado”, remarcó.

Dedicación laboriosa

Por su parte, el cardenal Blázquez invitó al nuevo pastor durante la homilía a “hacer de su vida una dedicación laboriosa y diligente, impregnada de afecto, a tiempo y a destiempo, gastándose y desgastándose por los demás”. “¡Que nunca convierta la autoridad del ministerio episcopal en poder según los criterios de este mundo!”, alertó.

“El ministerio episcopal es en sí mismo un servicio a los demás que debe ser cumplido servicialmente, como nos enseñó Jesús lavando los pies a sus discípulos”, expuso el purpurado, que también le encomendó “transformar y alegrar la vida” de los demás “en la pobreza, la enfermedad, la exclusión y la soledad que asfixia”.

“¡Que ofrezca una imagen de la Iglesia abierta a todos, los de cerca y los de lejos, que manifieste el Evangelio que es la mano de Dios que levanta a los humillados!”, deseó Blázquez. Además de recordar el vínculo personal entre ambos, en tanto que Blázquez fue alumno suyo en la Universidad Pontificia de Salamanca, subrayó que el cumpleaños de Rico es el 15 de octubre, festividad de san Teresa de Jesús, patrona de la diócesis, una “coincidencia feliz” que también comparte con el cardenal Antonio Cañizares, que también fue obispo de la región.