El Congresista de los Estados Unidos, Chris Smith, en su calidad de presidente del subcomité de Derechos Humanos Globales de la Cámara y copresidente de la Comisión de Derechos Humanos Tom Lantos, hizo un llamado al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, para que proporcione pruebas de que el obispo Álvarez está vivo y permita a la Cruz Roja examinarlo:
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“El obispo Álvarez, un valiente y compasivo siervo de Dios, ha sufrido inmensamente a manos del brutal régimen de Daniel Ortega durante más de un año. Según los informes, permanece injustamente encarcelado en el Complejo Penitenciario Jorge Navarro, llamado La Modelo, que es conocido por sus duras condiciones”.
El obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez, actualmente purga una condena de más de 26 años de prisión por delitos considerados por el régimen sandinista como ‘traición a la patria’.
Para Smith, dado que no ha habido pruebas fehacientes del estado de salud del obispo ni siquiera de que esté vivo, es importante que el presidente Ortega proporcione pruebas a la comunidad internacional de que el obispo Álvarez sigue vivo y permita el acceso inmediato de la Cruz Roja para examinar su salud “sin restricciones y sin la presencia de funcionarios gubernamentales o guardias penitenciarios”.
Derechos humanos
Aseguró que la seguridad y el bienestar del obispo Álvarez y los demás presos religiosos y políticos que continúan siendo perseguidos por el régimen de Ortega-Murillo es una de las principales preocupaciones del Congreso de los Estados Unidos y de los defensores de los derechos humanos en todo el mundo.
“Todos los presos religiosos y políticos deben ser liberados“, aseveró.
Una vez más, el congresista Chris Smith pidió al presidente Daniel Ortega que le ayude a tener reunión con el obispo Álvarez en Nicaragua.
Por otro lado, la abogada nicaragüense en el exilio, Martha Patricia Molina, dio a conocer en sus redes sociales que tuvo conocimiento de que al sacerdote William Mora, párroco de la Parroquia Cristo Rey – Ubu Norte Paiwas, de la diócesis de Siuna, quien asistió a la JMJ 2023, en Lisboa, “la dictadura sandinista prohibió su ingreso al territorio nacional“.
Detalló que el religioso es responsable de la pastoral juvenil en la referida diócesis y “tenía una vida pastoral activa en su comunidad que ahora se pregunta que será de ellos sin su pastor”.
