Más de 800 personas de las 41 diócesis han comenzado en La Lastrilla, en Segovia la asamblea de la Hermandad Obrera de la Acción Católica, la HOAC, una cita en la que han participado también personalidades de la Iglesia española, representantes de otros movimientos de Acción Católica, asociaciones de laicos y movimientos de trabajadores cristianos de ámbito internacional. A través de un mensaje en vídeo el arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, ha invitado al movimiento “a trabajar para que todo el mundo tenga un trabajo digno” y a transmitir “con alegría la buena nueva del Evangelio”.
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Conversión integral
En esta primera jornada, la del 12 de agosto, la presidenta de la HOAC, Maru Megina ha invitado en su discurso inaugural a “atender el encargo que nos hace el papa Francisco a la HOAC de seguir cuidando y ayudando a la conversión integral que el mundo necesita”, “cuidando de los empobrecidos a causa de la incorrecta comprensión que nuestro mundo tiene del trabajo y haciéndolo como Iglesia presente y encarnada en el mundo del trabajo”.
La asamblea tiene el lema ‘Tendiendo puentes, derribando muros. Iglesia en el mundo obrero tendiendo vínculos de fraternidad’, por ello Megina ha denunciado que “vivimos en una sociedad que está construida cada vez menos para las personas y más para asegurar los grandes beneficios de unos pocos, para el dios dinero”. Aún así, ha reivindicado que “venimos a celebrar” porque “sabemos que nuestro buen Padre-Madre Dios nos acompaña, y comparte los muchos sufrimientos y las pocas alegrías de los descartados”.
Compromiso eclesial
Por su parte, el presidente de la Conferencia Episcopal ha destacado la “plena sintonía” de este movimiento con “la Iglesia que sueña Jesucristo: una Iglesia comprometida en la construcción de un mundo más humano, más justo y más fraterno. Una Iglesia que es un hogar, una casa con las puertas abiertas a todos y, sobre todo, una casa abierta a los empobrecidos de este mundo”, indicó en su mensaje en vídeo. Omella ha agradecido el esfuerzo por “tender puentes y derribar muros”. “Gracias por sembrar semillas de reconciliación en nuestra sociedad”, añadió. El cardenal animó a la militancia de la HOAC, “a trabajar para que todo el mundo tenga un trabajo digno” y a transmitir “con alegría la buena nueva del Evangelio”.
El obispo de Almería y consiliario de la Acción Católica Española, Antonio Gómez Cantero, también destacó la necesidad de tender puentes en un mundo profundamente fragmentado. “Derribar muros significa búsqueda, sinodalidad, sobre todo, encontrar unos con otros”, ha puntualizado, al tiempo que ha señalado que ahora lo difícil es saber “cómo tendemos puentes, cómo derribamos muros para que aquellos que son diferentes de nosotros en el pensamiento, en la forma de vivir la espiritualidad, y en la forma de vivir en Iglesia, empezando por nosotros mismos, quepamos dentro de la Iglesia”. En la jornada también intervinieron el obispo de Astorga, Jesús Fernández, presidente de la subcomisión episcopal de Acción Caritativa y Social; y el obispo de Bilbao, Joseba Segura; y la vicepresidenta de AVAELA, Esperanza Oña.