Los obispos de Perú llegan a su 125ª Asamblea plenaria con tres temas: situación política, elección de vicepresidente y secretario general y la evaluación de sus obras, especialmente, en la Amazonía.
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Es así como del 22 al 25 de agosto, en Lima, los prelados que gobiernan las 46 jurisdicciones eclesiales de Perú con un total de 1.587 parroquias trazan el itinerario pastoral, que ha estado marcado por la crisis política.
Dedicarán una buena parte de esta asamblea para abordar la reestructuración que tienen ad portas como también la presentación de informes para evaluar el camino recorrido.
Relevos en altos cargos
Guillermo Inca Pereda, secretario general interino, explicó que “en un ambiente de oración, comunión y fraternidad” se elegirán al segundo vicepresidente que relevará al cardenal Robert Prevost, ahora prefecto del Dicasterio de los Obispos y al secretario general que sustituirá a Lizardo Estrada, actual secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam).
Además analizarán las secuelas del fenómeno climático el Niño y tienen previsto entregar los reconocimientos a los ganadores del premio Nacional de comunicación social Cardenal Juan Landazuri.
El sacerdote explicó que tienen previsto presentar la carta pastoral a todo el pueblo de Dios este 25 de agosto en el que compartirán la ruta pastoral de los venideros años con su respectivo discernimiento sobre la situación país.
Compartir experiencias
Contarán con la participación de la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, asentada en Colombia. Astolfo Moreno y María Inés Espinoza, sacerdote y laica respectivamente, describirán el camino misionero y pastoral desde esta organización.
Asimismo participarán representantes de la Conferencia Eclesial de la Amazonía (Ceama), Cáritas y las Obras Misionales Pontificias (OMP), que compartirán experiencias pastorales con los prelados.
Por ahora, piden a la feligresía que los acompañe en oración sobre todo en momentos cuando el país se encuentra polarizado en torno a temas sociales y políticos. El llamado de los obispos peruanos ha sido mantener la unidad y respetar las instituciones democráticas.
Foto: Archivo