Solo un mes después de que se hicieran públicas las desavenencias entre la Diócesis de Basbastro-Mozón y la Prelatura del Opus Dei sobre la gestión de Torreciudad, el santuario epicentro del carisma promovido por san Josemaría Escrivá de Balaguer, se abre una posible salida al conflicto abierto.
Tal y como expone la diócesis aragonesa en un comunicado, “hace unas horas” recibían “una propuesta de acuerdo” que “estudiará con diligencia y cariño, en la confianza de que nos servirá para seguir dando pasos en el compromiso conjunto de servicio a la Iglesia”. Fuentes de la Obra consultadas por Vida Nueva confirman este extremo, si bien no dan detalle alguno de la negociación hasta que llegue a buen término. Eso sí, confirman que, mientras tanto, se mantiene abierta la petición a Roma de medidas cautelares para que se suspenda el nombramiento del sacerdote diocesano José Mairal hasta que se resuelva la crisis. De la misma manera, también continuarían con la intención de interponer el recurso ante la designación del obispo Ángel Pérez Pueyo sobre la dirección del santuario.
También aclaran desde el Opus Dei que, si se llegara finalmente a un acuerdo, se frenarían en seco todas las medidas adoptadas hasta ahora. “Al final a todos nos interesa resolver esta cuestión desde el diálogo y no tendría ningún sentido seguir con un litigio”, subrayan desde la Prelatura.
Este talante es el que comparte también el equipo asesor de la diócesis de Barbastro-Monzón, que en el comunicado de hoy “se reafirma en los criterios de sus motivaciones canónicas y de comunión eclesial”.
En una llamada a la discreción, desde el Obispado se subraya que mañana viernes 1 de septiembre “no está previsto ningún acto, reunión o encuentro”. O lo que es lo mismo, no habrá una toma de posesión oficial del rector. “De cara a evitar injerencias en su normal funcionamiento, rogamos el máximo respeto a este enclave y a cuantas personas se acercan diariamente a él”, comentan en el texto.
En paralelo, la diócesis aclara que el nombramiento de Mairal “no supone – y así consta en el decreto- injerencia alguna en la gestión interna, económica o civil de Torreciudad”. “Se circunscribe a la dimensión pastoral y tendrá vigencia temporal, hasta que se regularice la situación canónica existente”, añade el comunicado, que recuerda que el nombramiento se dio a conocer por escrito y de forma verbal a la Prelatura en tiempo y forma.
Además, se recuerda que en 2020 “verbalmente en junio y por escrito en septiembre, la Prelatura del Opus Dei solicitó al Obispado de Barbastro-Monzón la novación del contrato de cesión de la ermita y la imagen de la Virgen de Torreciudad, propiedad ambas del Obispado”. Tras el análisis del contrato de 1962, así como de posteriores acciones en los últimos 60 años, el equipo jurídico del Obispado “convino en la imposibilidad de realizar la novación en los términos solicitados y en la necesidad de actualizar la situación jurídica, canónica y pastoral entre las partes”. Fue entonces cuando, según la versión de la Diócesis, se abrió un periodo de conversaciones “suspendidas por la Prelatura en enero pasado y que el Obispado confía en retomar lo antes posible”.
El comunicado llega a detallar que se han producido “más de una docena de encuentros” entre el Opus y el Obispado, en los que el equipo de Pérez Pueyo advirtió que “el complejo inaugurado en 1975 no estaba erigido como santuario, instando en enero pasado a la presentación de los correspondientes estatutos para su erección canónica”. “El Obispado espera recibir en breve esa propuesta de estatutos”, remata el documento.
Desde el Opus Dei matizan este comunicado episcopal, subrayando a ‘Vida Nueva’ que “bajo ningún concepto Torreciudad se ha encontrado en una situación de ilegalidad a lo largo de estas seis décadas”.