El arzobispo de Kiev espera mostrar en su sínodo en Roma la realidad ucraniana

“El mundo está empezando a redescubrir el pasado criminal del imperio ruso”. Así de contundente se ha mostrado Sviatoslav Shevchuk, arzobispo mayor de la Iglesia greco-católica ucraniana en su tradicional mensaje en vídeo con motivo de la semana 81 de la guerra en Ucrania.

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Junto al pueblo

El primado destacó en su último mensaje que se están librando cruentas batallas en toda la línea del frente, pero hoy es evidente para todos que Ucrania está dispuesta a liberar todos sus territorios. Para él, “el enemigo sigue bombardeando nuestras pacíficas ciudades y pueblos”. Por ello, ratifica, “cada día mueren civiles, y la Iglesia greco-católica ucraniana está con su pueblo: cura sus heridas, les proporciona atención espiritual y consuelo, alimenta a los hambrientos e intenta acoger a los que necesitan refugio en todas las partes de nuestra patria”.

“Estamos aprendiendo a vivir y servir a Dios y a Ucrania de una manera nueva. Y hoy, queremos que el mundo entero oiga que Ucrania está de pie, Ucrania está luchando, Ucrania está rezando”, señaló el arzobispo destacando el cambio de fecha de la Navidad al calendario occidental, “lo que constituye un acontecimiento verdaderamente histórico”.

La verdad del pasado

Ante el nuevo Sínodo que va a celebrar próximamente en Roma, “la segunda esperanza está relacionada con el hecho de que en Roma hemos tomado un púlpito desde el que podemos hablar con voz potente en nombre de Ucrania al mundo entero”. Así, destacó, “en los últimos días, el mundo entero está empezando a redescubrir el pasado criminal del Imperio ruso, está empezando a escuchar la recreación de la historia en tierras ucranianas desde el punto de vista no de un ocupante y colonizador, sino de un pueblo oprimido”, señaló el primado a partir de la polémica surgida tras unas palabras del papa Francisco.

Por ello, reclamó, “debemos decir la verdad sobre nuestro pasado, nuestro presente y nuestra esperanza en el futuro. Y vemos y sentimos que la atención del mundo entero se centra en nuestro trabajo. Todos quieren oír lo que la Iglesia greco-católica ucraniana dirá en nombre de su pueblo Urbi et Orbi”. “Sabemos que el Papa es un gran experto en escuchar y un maestro de los gestos: profundos, elocuentes, salvadores. Y ahora incluso ha ampliado el tiempo de audiencia de nuestro Sínodo para escuchar a los obispos ucranianos. Queremos hablar en nombre de los ucranianos al corazón del Santo Padre”, destacó esperanzado.