Francisco se ‘escapa’ del Vaticano para encontrarse con 35 sacerdotes de Roma

El Papa ha ido a la parroquia de Santa Maria de la Salud en Primavalle, donde en junio se celebró el funeral de Michelle Causaso, víctima de feminicidio a los 17 años

El papa Francisco se escapa del Vaticano para visitar a 35 curas

El papa Francisco no para. No le ha sido suficiente este jueves con las ocho audiencias que ha tenido esta mañana (entre ellas con el presidente de Portugal, Antonio Costa, y la Fundación Pablo VI), sino que esta tarde se ha ‘escapado’ del Vaticano para encontrarse con una treintena de sacerdotes de Roma.



Tal como ha anunciado el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, poco después de las 16:00 horas de esta tarde, el Papa “se dirigió a la parroquia de Santa María de la Salud en Primavalle, donde fue recibido por el vicegerente para la Diócesis de Roma”.

Allí se ha reunido a puerta cerrada con “los aproximadamente 35 sacerdotes” del territorio de Primavalle. “Al final, poco después de las 18:00 horas, regresó al Vaticano”.

La parroquia de Michelle Causaso

Este encuentro no ha sido solo un acto pastoral de Francisco como obispo de Roma, sino que pone de manifiesto la preocupación del Papa por las “periferias físicas y existenciales”. Y es que Primavalle no es solo la periferia de Roma, sino que en ella esperaba al Papa el obispo Baldo Reina, quien, el pasado mes de junio celebraba en la parroquia de Santa María de la Salud, junto al párroco, el funeral de Michelle María Causaso, una joven de 17 años que fue asesinada a puñaladas por otro joven con el que mantenía una relación.

El cuerpo de Michelle fue encontrado sin vida en un carrito de la compra, y la noticia que convertía a la joven en la mujer número 43 asesinada en Italia en 2023, no solo conmocionó a toda la ciudad, sino también al Papa. “¿No ha perdido su rumbo esta sociedad en la que todos estamos inmersos y de la que somos parte integrante? La degradación no está en un barrio o en un suburbio. La degradación está en el corazón de cada uno de nosotros”, decía en aquel momento Reina. “La degradación está en la cultura que respiramos, en la mentalidad que todos contribuimos a crear, en el desierto del alma”, subrayaba.

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