El llamado del Episcopado norteamericano ocurrió el mismo día en que el presidente Joe Biden enviaba naves militares para apoyar a Israel
Luego de que el pasado 7 de octubre Israel declarara estado de guerra tras los ataques sorpresivos de la organización político militar palestina Hamas, que ya rebasa los mil civiles muertos y miles de heridos, los obispos de Estados Unidos han condenado y pedido el cese de los ataques.
La petición de los obispos norteamericanos ocurrió el mismo día en que el gobierno de Joe Biden envió naves militares al Mediterráneo oriental para apoyar a Israel tras los ataques de Hamas contra territorio israelí.
El obispo de Rockford, David Malloy, en su calidad de presidente del Comité de Justicia y Paz Internacional de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), pidió oraciones por la paz en Tierra Santa:
“Casi 50 años después del inicio de la guerra árabe-israelí de 1973, una vez más la guerra se está extendiendo en Tierra Santa. Con ello, aumentan las bajas y las hostilidades que se desarrollan en todos los bandos, y el aumento de las amenazas al ‘status quo’ de los lugares santos entre judíos, musulmanes y cristianos oscurece aún más cualquier esperanza de paz”.
Tras señalar que el mundo está conmocionado y horrorizado por el estallido de violencia feroz en Tierra Santa, Malloy se unió al papa Francisco en su llamado a la paz y su condena de este estallido generalizado de violencia.
“Como afirmó en su audiencia del domingo: ‘que los ataques y las armas se detengan, por favor, y que se comprenda que el terrorismo y la guerra no llevan a ninguna solución, sólo a la muerte y al sufrimiento de tantos inocentes'”.
El obispo hizo votos para que, entre todas las partes involucradas, logren llegar a acuerdos para que cese la violencia, y se alcance el respeto a las poblaciones civiles y la liberación de los rehenes.
También hizo un llamado a poner en oración a todas las familias e individuos que sufren estos acontecimientos. “Hacemos un llamado a los fieles y a todas las personas de buena voluntad a no cansarse y continuar orando por la paz en la tierra que Nuestro Señor, el Príncipe de la Paz, llamó hogar”.
Según agencias internacionales, hay unos 700 muertos en Israel, además de 2.300 heridos; mientras que en Gaza han fallecido 493, entre ellos 91 niños, y hay más de 2.700 heridos, después de los bombardeos que durante la noche del domingo y la madrugada del lunes han golpeado fuertemente esa región palestina.