Ocho sacerdotes de Nicaragua, del arraigo domiciliario a la cárcel ‘El Chipote’

17/10/2023 | Miroslava López

Hasta el momento se tienen registrados 12 curas y un obispo encarcelados, distribuidos en tres prisiones

Catedral de Nicaragua. Foto: Arquidiócesis de Managua

Medios locales de Nicaragua informaron que los ocho sacerdotes detenidos recientemente por el gobierno de Daniel Ortega, dejaron el arraigo domiciliario para ser oficialmente encarcelados en ‘El Chipote’, una prisión considerada de tortura para presos políticos.

De acuerdo con el diario El Confidencial, tanto los seis detenidos entre el 1 y 9 de octubre por la Policía Nacional de Nicaragua, así como otros dos sacerdotes aprehendidos también en este año, se encontraban bajo arraigo domiciliario en el Seminario Nacional Nuestra Señora de Fátima, en Managua, pero fueron desarraigados para ser ingresados a la cárcel de castigo.

“Se los llevaron, todos están en ‘El Chipote'”, reveló a dicho medio un sacerdote que conocía la situación de sus compañeros, aunque hasta el momento la Policía Nacional de Nicaragua no ha confirmado el traslado de los presbíteros a ‘El Chipote’, ni los familiares de los ministros tienen información sobre su paradero.

De varias diócesis

Los sacerdotes que ya se encuentran en ‘El Chipote’, según El Confidencial, son: Julio Ricardo Norori, Iván Centeno, Álvaro Toledo y Yessner Pineda, de la Diócesis de Estelí; Cristóbal Gadea, de la Diócesis de Jinotega; y Ramón Angulo Reyes, párroco de Wapí, en El Rama, Diócesis de Bluefields. Además de ellos, se encuentran en este penal los padres Pastor Eugenio Rodríguez Benavides y Osmar Amador Guillén, también de la Diócesis de Estelí pero que fueron detenidos antes de octubre.

Hasta el momento se tiene un registro de 12 sacerdotes presos en Nicaragua, además del obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez. Los 13 se encuentran distribuidos en tres cárceles: ‘El Chipote’ (9), ‘La Modelo’ (3) y ‘La Granja’ (1). De ellos, tres han sido condenados por delitos fabricados en juicios sin derecho a la defensa, y los otros diez no tienen ninguna condena oficial. Algunos incluso aparecen en estatus de ‘bajo investigación’.