El secretario general de la Conferencia Episcopal Española, César García Magán, confirmó esta mañana que la auditoría inconclusa encargada al bufete Cremades & Calvo-Sotelo para radiografiar la pederastia eclesial sigue adelante, de momento. “Se sigue trabajando porque el encargo sigue vivo”, expuso el portavoz de los obispos en el marco de la rueda de prensa tras la Asamblea Plenaria Extraordinaria que los obispos celebraron ayer por la tarde centrada en la lacra de los abusos sexuales.
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Junto a García Magán, también compareció el presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal Juan José Omella, que explicó que “se ha ido retrasando las fechas de entrega y estábamos desconcertados”. Y es que el estudio encargado al despacho de abogados en febrero de 2022 tenía una duración prevista de doce meses y ya lleva unos ocho meses de demora. “No hay otra cosa con Cremades”, aclaró el purpurado.
Explicar y decidir
Aunque en principio la reunión de ayer tenía como objetivo decantarse sobre la pertinencia de continuar adelante o no con esta auditoría, una vez más los obispos han decidido posponer esta decisión final a la Asamblea Plenaria que celebraran a finales de noviembre. “Después del informe del Defensor del Pueblo, es muy complicado por zoom explicar las cosas y tomar decisiones, pensamos mejor dejar unos días, tomar la decisión y madurar los datos. Esa es la razón por la que se ha retrasado. Se trata de quince días más”, comentó Omella.
Es más, incluso dio un paso al frente para asegurar que “hay comunión y unión entre los obispos, no estamos divididos”, ante posibles alusiones sobre un enfrentamiento abierto en el seno del Episcopado por seguir o no adelante con la auditoría de Cremades.
La rumorología
Al paso, García Magán también quiso quitar hierro a las desavenencias existentes con Cremades y al plazo de diez días dado hace unas semanas para que entregar el informe definitivo, que ahora se anuncia para finales de año. “En ningún caso se planteó como un ultimátum sino que se le recordaba el compromiso que había adquirido con nosotros sobre la entrega”, expuso el portavoz de los obispos. También dejó caer que “el ámbito de la rumorología es plural, abierto y abonado”.
En cualquier caso, desveló que oficialmente “no tenemos el informe pero se nos ha informado de los trabajos de forma periódica de la relación de confidencialidad como clientes”. “Casi todos los meses nos hemos reunido con el equipo de Cremades”, señaló. Además, tal y como adelantó ‘Vida Nueva’, confirmó que esta asamblea extraordinaria estaba prevista para tratar este tema y que fue una decisión improvisada tras presentarse el informe del Defensor del Pueblo.
