Víctor Hugo Basabe es el nuevo arzobispo de Coro, ciudad del noroccidente venezolano y una de las seis más antiguas de latinoamérica. Es conocido por sus férreos cuestionamientos a Nicolás Maduro.
El prelado venía de ejercer como obispo de san Felipe, estado de Yaracuy, desde 2016. En 2020 es nombrado administrador apostólico “sede vacante” de Barquisimeto. Ahora releva a Mariano José Parra Sandoval, quien renunció por límite de edad.
Durante las fiestas de la Divina Pastora, patrona de Barquisimeto, en enero de 2023, ante miles de feligreses, Basabe denunció a todo pulmón la burbuja económica que en ese entonces vivía el país con el dicho “Venezuela se arregló”.
“Que cesen las burbujas de la falsedad económica que pretenden ocultar al mundo la precaria situación en la que están inmersos la mayor parte de nuestros hermanos venezolanos”, expresó.
El tiempo ha dado la razón al prelado, puesto que en menos de 10 meses el régimen vuelve a echar mano del argumento de las sanciones para negociar con el bloque opositor en Barbados. La crisis nuevamente arrecia en el país petrolero, que de facto se ha dolarizado, pulverizando el valor de la moneda nacional, el bolívar.
Desde que fue nombrado obispo en san Felipe, Basabe ha plantado cara a los chavistas. En la procesión de la Divina Pastora de 2018 lamentó que “la peste de la corrupción política llevó al país a la ruina moral, económica y social”.
El aparato represivo del Estado inmediatamente abrió una investigación contra el obispo acusándolo de “crímenes de odio”. El propio Maduro – como hacía el fallecido Hugo Chávez – lo llamó “diablo con sotana”.
“Nadie cree en estos diablos con sotanas (que vinieron) a llamar al enfrentamiento entre venezolanos, a la guerra civil”, dijo el líder chavista en su momento.
En 2020, un nuevo reclamo de Basabe se registró, tras la visita de la nueva directiva del Parlamento, de mayoría chavista e impuesta por el régimen, a la sede de la conferencia de obispos.
El obispo criticó a Luis Parra, entonces presidente del parlamento, quien llegó con escoltas “no oficiales” para que fueran recibidos: “En la vida siempre se puede caer más bajo, peor si nos domina la ambición”, trinó.
Nació el 17 de diciembre de 1961 en Bobures, diócesis de El Vigía – San Carlos del Zulia, un pueblo afrodescendiente, muy devoto a san Benito.
Es abogado y filósofo. Comenzó sus estudios eclesiásticos en 1993 y recibió el diaconado de parte de Roberto Lückert, arzobispo emérito de Coro, en la capilla del Colegio Mater Ecclesiae en Roma, el 29 de junio de 1999.
Fue ordenado sacerdote el 19 de agosto de 2000, incardinándose en la diócesis de El Vigía – San Carlos del Zulia. En 2016, es ordenado obispo de san Felipe.
Actualmente dentro de la conferencia de obispos es miembro de la Comisión Episcopal de Gestión, Planificación, Administración y Asuntos Jurídicos. Entre los cargos que ha ejercido están el de subsecretario de la Conferencia Episcopal Venezolana hasta enero de 2015 hasta 2018 cuando fue nombrado secretario general.
Foto: CEV