El secretario general del Episcopado llama a la oración, pero también a la donación solidaria
Luego de que el pasado 25 de octubre el huracán Otis dejara a su paso por las costas del estado de Guerrero -principalmente en el municipio de Acapulco- miles de damnificados, incontables pérdidas materiales y al menos 45 fallecidos, la Iglesia en México reiteró el llamado a la solidaridad con las víctimas.
Cáritas Mexicana es el brazo de la Iglesia que está gestionando la ayuda a los afectados, tanto la económica como en especie, así como la logística para que se canalice la atención a los que más lo requieren.
En ese sentido, el obispo de Cuernavaca y secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Ramón Castro Castro, hizo un llamado a la solidaridad, “a hermanarnos como hijos de un mismo Dios, no importando partido político, condición social o credo”.
Pidió tener en cuenta que, en momentos de adversidad, “somos una Iglesia de acción, una comunidad unida por la fe y el amor. Juntos, de la mano de nuestra madre la Virgen de Guadalupe, podemos ver la luz en medio de la tormenta, la esperanza en medio de la desesperación y el consuelo en medio del dolor”.
El obispo llamó a estar unidos en oración por los que han sufrido por el huracán Otis en Guerrero, “por los que han perdido a seres queridos, por los que se han quedado sin un techo y donar en ‘un gesto de amor'” a través de la red nacional Cáritas, cuyos datos son: Cáritas Mexicana IAP. Banco BBVA. Cuenta: 0123456781. Clabe interbancaria 012180001234567815.
Cáritas Mexicana también dio a conocer su respuesta a la emergencia ocasionada por el huracán Otis, así como la forma en la que se están coordinando para llevar la ayuda a los afectados, por el momento se encuentran en la fase de evaluación de daños.
El padre Filiberto Velázquez es el director de la Pastoral Social de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa y quien está coordinando los diferentes grupos de las Cáritas diocesanas que han llegado en auxilio de la Arquidiócesis de Acapulco.
En estos días se sumaron equipos de Cáritas diocesanas de Tula y Texcoco, quienes llegaron a colonias lejanas de Acapulco, como Playa Azul, La Zapata, La Sabana, Solidaridad, Coloso y Jesús Mendoza, a donde la ayuda del Ejército aún no ha llegado.
De igual modo, se anunció que en dicho trabajo de emergencia se sumó el Equipo Comunitario de Respuesta a Emergencia Diocesano, cuyo coordinador es el ingeniero José Ghandi.