Durante 2 días se reunió en Santiago de Chile el equipo coordinador del Centro de Gestión del Conocimiento (CGC) del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) para iniciar el proceso de elaboración del programa de los próximos 4 años del Centro como parte del Plan Global del CELAM.
La reunión fue encabezada por el coordinador del Centro, el obispo de Copiapó (Chile), Ricardo Morales, OdM, y participaron su director, Guillermo Sandoval, Agustín Salvia y Francisco Campos, quienes tienen a cargo el Observatorio Socio Antropológico Pastoral y el Área de Conocimiento Compartido, respectivamente.
La nueva estructura organizacional del CELAM comprende 4 Centros: de Gestión del Conocimiento, de Formación-Cebitepal, de Programas y redes de acción pastoral y el Centro para la Comunicación.
El obispo Morales explicó a Vida Nueva que el Centro de Gestión del Conocimiento (CGC), “tiene entre sus misiones escrutar los signos de los tiempos, de manera tal de ayudar a la Iglesia en dar esas respuestas que el Evangelio nos pide para los contextos que nos toca vivir. Una respuesta ‘a la luz de la Palabra de Dios, la reflexión teológica y el Magisterio Eclesial’”.
“Los signos de los tiempos, agrega el obispo, son esa categoría teológica que nos ayuda a comprender el tiempo presente con la mirada de Jesús, una mirada que es por sobre todas las cosas una mirada de esperanza, pues todo lo humano interesa a Iglesia. En esta perspectiva, el contar el CGC con un consejo muy sinodal, donde participan diversas personas con distintas responsabilidades eclesiales, podemos reflexionar específicamente en como hoy es interpelada la Iglesia en Latinoamérica a ser una compañera de camino de tantas situaciones, muchas de ellas complejas o demandantes. El Centro debe ayudar al CELAM a tener elementos que ayuden a un adecuado discernimiento de todo lo que las diversas Conferencias Episcopales del continente deben decidir en sus proyectos o planes pastorales”.
Guillermo Sandoval complementa señalando que el marco para esta planificación son las 6 dimensiones pastorales del documento de la Asamblea Eclesial Latinoamericana. “Nuestro trabajo, señala Sandoval, es indicar lineamientos para actividades a realizar en los próximos 4 años en cada una de esas dimensiones, con énfasis en las 2 últimas: la socio transformadora y la ecológica”.
“Para eso disponemos de dos ámbitos de acción: un observatorio, que dispone de una red de universidades que tienen observatorios de la deuda social, y el área de conocimiento compartido cuyo objetivo es generar redes desde las raíces de la iglesia para recoger el conocimiento que surge de la experiencia pastoral”, dice Sandoval. Agrega que “en ambos ámbitos se trata de enfatizar el camino sinodal. Para eso el observatorio cuenta con corresponsales pastorales y el conocimiento compartido está construyendo redes en diversas temáticas eclesiales para generar intercambio entre las experiencias, ponerlo en diálogo con el conocimiento experto y sistematizarlo”.
El Área de Conocimiento Compartido tiene como tarea promover métodos y una plataforma para la identificación, formalización, procesamiento y la difusión de conocimientos y buenas prácticas pastorales, en particular desde las comunidades y organizaciones de base de la iglesia. En ella se integran la Biblioteca, la Hemeroteca y el Archivo del CELAM que está siendo digitalizado para facilitar el mayor acceso posible a sus contenidos. Además de ser de acceso público, sus archivos son descargables lo que da más facilidades.
Agustín Salvia, sociólogo, magister en ciencias políticas y doctor en ciencias sociales, dirige el Observatorio de la Deuda Social Argentina en la Universidad Católica Argentina. Ahora también dirige el Observatorio del Centro de Gestión del Conocimiento, del CELAM y describe su labor diciendo que “mira la situación de América Latina a través de sus líneas de trabajo: la sustentabilidad ambiental y ecología integral; la discriminación de la mujer y su inserción dentro y fuera de la iglesia; la economía social, popular, circular, como respuestas a la crisis del empleo insuficiente; la inclusión y exclusión de las juventudes en sus diversas circunstancias específicas; las grietas políticas ideológicas que giran entre los populismos de derecha e izquierda y debilitan la democracia; y también estamos trabajando en el área de la Amazonía”.
Salvia complementa el servicio de ambas redes ya que “la red que yo coordino en la universidad ofrece al CELAM cada año un diagnóstico multidimensional e integral del desarrollo humano y de los procesos de integración social y política en América Latina. Una especie de balance anual de los cambios que van ocurriendo cada año y el estado de situación de los derechos sociales en sus diferentes aspectos”.
El obispo Morales precisa que “el CGC reporta su servicio directamente a las autoridades del CELAM, de modo de tener elementos sobre la realidad social, económica y cultural en América Latina y El Caribe, respondiendo de ese modo a las necesidades pastorales de las diversas Conferencias Episcopales”.
Agrega: “tal como señalamos en la identidad del Centro, se trata de: “Una instancia de investigación capaz de procesar conocimiento de manera oportuna, y presentarlo de manera amigable a los diversos tomadores de decisiones a los que sirve”, en ese sentido el fin último va en ser una ayuda a cada Iglesia particular en la medida que el trabajo del Centro de gestión del Conocimiento le resulte útil, de ahí la importancia de la adecuada difusión de las investigaciones y de cada día mejorar ésta”, concluye el obispo coordinador.