Leopoldo González recuerda que el agua y el alimento sigue siendo lo urgente
A más de 10 días de que el huracán Otis tocó tierra en las costas del estado de Guerrero, particularmente en el puerto de Acapulco, la ayuda para superar la emergencia sigue siendo necesaria; las cifras de fallecidos se han actualizado a 47 muertos y hay 56 desaparecidos, así como incontables destrozos y afectaciones.
En ese contexto es que el arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González, llamó a seguir ayudando para superar la emergencia e iniciar la reconstrucción; además, dijo que el hambre es grande y también la necesidad de las personas, por lo que el agua y el alimento sigue siendo lo urgente.
Agradeció la ayuda que ha llegado de diferentes lugares y diócesis: “el Señor se hace cercano en la bondad de tantas personas y comunidades que nos han compartido su tiempo, su cariño y sus bienes, y se hace cercano también en el duro esfuerzo de tantos grupos e instituciones por restablecer los servicios básicos en la ciudad y tender la mano a los más necesitados”.
Recordó que mucha gente quedó sin un techo donde guarecerse, por lo que los refugios han sido de gran ayuda, y también la solidaridad de familiares y amigos que les han cedido un espacio en su casa.
El arzobispo González alertó del riesgo de enfermedades gástricas, respiratorias y dengue, por lo que dijo que es necesaria la limpieza de la ciudad y coordinarse con los vecinos para tal fin; llamó a poner cal donde haya basura en descomposición “y si alguno de ustedes sabe cómo aprovechar lo que no es basura y que se encuentra en las calles, como la madera y las láminas, no deje de compartir”.
Para el arzobispo es fundamental unir los esfuerzos del gobierno y la sociedad civil: “empresarios, universidades, iglesias, organizaciones, todos unidos para ayudar a los más necesitados”.
También es importante -dijo- “reconstruir la persona: los ánimos de muchas personas están caídos, ha sido muy fuerte el trauma sufrido al perder en menos de una hora hogar, trabajo, pertenencias, y muchas familias, a un ser querido”.
Por ello agradeció y exhortó a los profesionistas de la conducta que en medio del desastre han puesto de su tiempo para escuchar a muchas personas en su angustia y tristeza; “invito a todos a unirnos en este servicio mutuo y ayuda”.
Finalmente, rechazó los robos y rapiña que se han presentado, por lo que llamó a recuperar esa sensibilidad ante el sufrimiento y pidió a las autoridades garantizar la seguridad de las personas y sus bienes.