El fundador y director general de la Academia Internacional de Líderes Católicos, José Antonio Rosas, respalda sin fisuras ‘Fiducia supplicans’, la reciente Declaración del Dicasterio para la Doctrina de la Fe sobre el sentido pastoral de las bendiciones que abre la puerta a realizar este gesto de gracia a las parejas de divorciados y homosexuales.
Para este especialistas en ciencias políticas y economía, con este paso al frente dado por el prefecto Victor Manuel Fernández, “el Papa no está bendiciendo el pecado como algunos fariseos posmodernos hoy sugieren o denuncian”. “Lo que el Papa recuerda es una enseñanza milenaria de la Iglesia: en medio de nuestra vida con todos sus errores y desaciertos, nunca dejamos de estar ante la mirada amorosa del Padre Eterno, quien bendice nuestras vidas, no nuestros pecados”, explica Rosas.
El director general de esta plataforma, nacida para promover un liderazgo cristiano en el mundo de hoy desde la Doctrina Social de la Iglesia, considera que el tema central de la Declaración vaticano aborda cómo “nadie deja de estar bajo la mirada amorosa de Dios”.
“Hoy, cuando el mundo entero desde el sufrimiento de los distintos rostros de violencia clama por paz y amor, lo que hace el Papa Francisco es una vez más invitar a toda la comunidad de discípulos del Nazareno, a que salgamos de nuestra comodidad y vayamos al cruce de caminos”, enfatiza Rosas. Sin citar explícitamente a los grupos cristianos a los que se dirigen estas bendiciones, sí les presenta como aquellos “a pesar de sus fragilidades y contradicciones -como todos nosotros-, buscan el rostro de luz y misericordia de Dios en las tinieblas e incertidumbres de la vida”.