Rosario Murillo arremetió nuevamente contra los ministros de la Iglesia católica, acusándolos de sembrar odio en el pueblo
La vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, utilizó una vez más los medios oficialistas para criticar a los ministros de la Iglesia católica, a quienes calificó de “diablos que siembran el odio en la sociedad nicaragüense”.
En un mensaje difundido en la edición de mediodía de este 27 de diciembre por el Canal 4, la también esposa del presidente Daniel Ortega aseguró que “es ridículo y hasta divertido que haya quienes, con palabras y sentimientos diabólicos, hablan de fe y son verdaderos diablos“.
Las declaraciones de Murillo se dan una semana después de que el gobierno sandinista detuviera al obispo Isidoro del Carmen Mora, obispo de la Diócesis de Siuna, cuyo paradero se desconoce hasta el momento.
Rosario Murillo insistió: “Los verdaderos diablos son los que tocaban las campanas para mandar a matar a nuestro pueblo“, afirmó, refiriéndose al conflicto social que, entre abril y septiembre de 2018, dejó más de 350 muertos a causa de las protestas contra una reforma al sistema de seguridad social.
Continuó la vicepresidenta: “Los verdaderos diablos son los que andan sembrando odio… los verdaderos diablos hablan en nombre de Cristo. ¡Qué increíble! Los verdaderos diablos son los que no toleran el amor, porque es la fuerza más poderosa que existe, y es con amor que hemos venido trascendiendo y venciendo. Con amor y esperanza que nadie puede arrebatarnos porque nos pertenece como pueblo de Dios”.
Por otra parte, medios locales de Nicaragua informaron sobre la detención y posterior liberación del canciller de la Curia Arzobispal de Managua, Pablo Villafranca, quien es también párroco de la Iglesia Nuestro Señor de la Veracruz, ubicada en la localidad de Nindirí, Masaya.
El sacerdote -quien en 2018 formó parte de la mesa de diálogo y negociación durante la crisis de 2018- habría sido detenido en su casa la mañana del 26 de diciembre y liberado seis horas después, pero se desconoce el motivo.
En la misa de Navidad, el sacerdote Villafranca pronunció una homilía que, se cree, fue la causa de la detención y liberación exprés. Dijo: “El poder que ejercen aquellos que gobiernan la tierra, se encumbran sobre los demás. Por eso cuando el hombre ha caído en el génesis y en su arrogancia pretende invadir el espacio de Dios y destronarlo… Aquellos que creen que pueden usurpar el trono de Dios, destronarlo, invadir su espacio y acabar con él, terminan siendo derretidos como cera, dispersados cuando pensaban que eran algo”.
También hay registro de que en agosto del año 2022, el sacerdote denunció ante la Radio Católica Mundial: “Nos graban las homilías y nos toman video de las homilías, tenemos patrullas alrededor de los templos. A mi parroquia llegan, por ejemplo, diario a preguntar lo mismo que cómo me llamo, que dónde ando, que a qué hora estoy, que cuál es mi nombre”.