El secretario para las Relaciones con los Estados y Organizaciones Internacionales ha revelado que visitará el país en abril y que, unos meses después, lo hará el cardenal secretario de Estado
El papa Francisco se ha reunido este jueves, 18 de enero, con una delegación de representantes del Partido Comunista de Vietnam. Un encuentro que, tal como señala el secretario para las Relaciones con los Estados y Organizaciones Internacionales, Paul Richard Gallagher, a Vatican News, ha sido “positivo”, así como una señal del estrechamiento de las relaciones con la Santa Sede y el país asiático.
La audiencia ha tenido lugar esta mañana en el Palacio Apostólico Vaticano, y el grupo se trasladó después a la Secretaría de Estado para reunirse con el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, y con el mismo Gallagher para seguir con las conversaciones diplomáticas.
Ha sido Gallagher quien ha informado de los detalles de la reunión, que se ha dado en el marco de una conferencia sobre las iniciativas para el 200 aniversario de la muerte del cardenal Ettore Consalvi en la Oficina de Prensa del Vaticano. Así, el arzobispo ha expresado su esperanza de que la comunidad católica pueda beneficiarse de este encuentro, el cual supone “un nuevo paso adelante en las relaciones bilaterales, además de otros importantes resultados alcanzados desde el punto de vista diplomático”. Asimismo, Gallagher ha destacado el acuerdo alcanzado en diciembre para el nombramiento de un representante papal residente en Vietnam, el Nuncio Apostólico en Singapur, el polaco monseñor Marek Zalewski.
Por otro lado, Gallagher también ha anunciado que visitará Vietnam en abril y que el Secretario de Estado Pietro Parolin lo hará en el transcurso del año. “Haremos las cosas gradualmente”, explica el prelado, que también se muestra optimista al responder a una pregunta sobre la posibilidad de una futura visita del propio papa Francisco: “Sí, creo que la habrá. Pero hay que dar un par de pasos antes de que eso sea apropiado. Creo que el Papa está deseando ir, ciertamente la comunidad católica está deseando que el Papa vaya y piensa que sería un mensaje muy bueno para toda la región”, añadió Gallagher. “Vietnam es de hecho un país importante”, una especie de milagro económico en muchos aspectos”, aseguró.