La Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés), detalló en su reporte anual sobre libertad religiosa las cinco formas en que el año pasado se atentó contra esa garantía constitucional, y advirtieron que esta tendencia continuará durante 2024.
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La primera amenaza a la libertad religiosa -de acuerdo con el informe elaborado por el Comité para la Libertad Religiosa de la USCCB- fueron los ataques contra lugares de culto, “especialmente en relación con el conflicto entre Israel y Hamas”, y sobre todo en contra de judíos y musulmanes.
Y es que -explicaron- los ataques terroristas contra Israel y el consiguiente estallido de la guerra provocó incidentes antisemitas en Estados Unidos, “incluidas exhibiciones impactantes de odio abierto, con actos de odio antimusulmán”.
La segunda amenaza se refiere a la regulación de la Sección 1557 del Departamento de Salud y Servicios Humanos, que “probablemente impondrá a los médicos un mandato para que realicen procedimientos de transición de género y posiblemente abortos”.
La tercera amenaza es contra las organizaciones benéficas religiosas que sirven a inmigrantes y refugiados. Estas fueron “blanco de una ira intensa, en gran medida motivada por la desinformación y la retórica partidista”.
Debido a lo anterior -apuntaron- “hubo llamados para que el gobierno los penalizara, a través de propuestas de restricciones a su acceso a programas y oportunidades de financiación, y eventualmente a un llamado a la violencia contra los empleados de las organizaciones benéficas”.
La cuarta amenaza a la libertad religiosa fue el reglamento de una ley, “cuyo objetivo es exigir que los empleadores religiosos sean cómplices del aborto de una manera sin precedentes”.
Y la quinta amenaza se refiere a una supresión del discurso religioso del matrimonio y la diferencia sexual.
Vandalismo contra iglesias y centros de embarazo provida
Los obispos explicaron en el reporte que, debido a que el control de las dos cámaras del Congreso se dividió en 2023, la mayoría presentó proyectos de ley que “amenazan la limitada libertad religiosa“.
Esos proyectos -dijeron- estuvieron relacionados con el aborto, la ‘orientación sexual’ y la ‘identidad de género’.
Asimismo, refirieron que en el año se observó una oposición al testimonio de los cristianos contra el aborto, lo que “continuó motivando el vandalismo contra iglesias y centros de embarazo provida”.
Señalaron que la celebración del ‘Mes del Orgullo’ generó numerosas controversias, entre ellas la “protesta y contraprotesta” de los Dodgers de Los Ángeles, que tuvo la “decisión de honrar a un grupo anticatólico como parte de las festividades del equipo de béisbol en la ‘Noche del Orgullo'”.
En ese contexto, el obispo de Fort Wayne-South Bend y presidente del Comité para la Libertad Religiosa, Kevin C. Rhoades, destacó que “los católicos tienen un papel vital que desempeñar en la defensa de la libertad religiosa y la promoción del bien común”.
El obispo recordó que “la libertad religiosa está consagrada en nuestra Constitución en la Primera Enmienda, y es algo tan vital para el tejido de nuestro país que a menudo se le conoce como nuestra ‘primera libertad’. Si bien la mayoría de los fundadores de nuestro país no eran católicos, hay mucho en su visión que resuena con una comprensión católica de la libertad religiosa”.
