Desde el corazón de la selva peruana, la Academia Latinoamericana de Líderes Católicos culminó la inédita experiencia de fundar su primera escuela en territorio amazónico.
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Se trata de los vicariatos de san José del Amazonas y de Pucallpa, en la localidad de Iquitos, en la que formaron a tres grupos de líderes con docentes, adultos y escolares.
Todo ello en colaboración con la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, la Universidad Finis Terrae de Chile y ACN Internacional.
Por eso que este 12 de febrero –a cuatro años de la publicación de ‘Querida Amazonía’– celebran este logro que llevó a muchos de sus profesores a bogar por el río Amazonas para promover la cultura del encuentro y la defensa de los derechos humanos.
Una de las primeras experiencias fue con 100 docentes del vicariato de san José, quienes cruzan el río para llegar a clases. También se han encontrado con (escolares) jóvenes de la escuela Padre Colegio Severino Deshaies (Aucayo) a la que solo se llega en bote.
A tono con ‘Querida Amazonía’
Joaquin Eguiluz, coordinador de comunicaciones de la academia, explicó que abordaron temas de cultura del encuentro, bien común, trabajo en equipo, derechos humanos, incluso abordaron el uso responsable de las redes sociales.
Además los participantes han profundizado en doctrina social de la Iglesia. Así Claudia Zarzosa, subdirectora de la academia en Perú, afirmó que con esta vivencia “hemos podido reafirmar el compromiso de la Academia Internacional de Líderes Católicos con el mensaje del papa Francisco” en torno a Querida Amazonía.
“Nos esforzamos por llevar la esperanza y el mensaje del Evangelio, fortaleciendo los liderazgos en los sectores más desfavorecidos. En estos contextos, es crucial el
compromiso de cada ciudadano en la protección del medio ambiente y en la salvaguarda de la riqueza cultural y diversidad que los distingue”, explicó.
Ha sido una travesía excepcional “marcada por el arduo esfuerzo y el testimonio de cada uno de los participantes”, comentó Luis Ernesto Gutiérrez, director de Escolares Lima, quien destacó el trabajo y respuesta de los vicariatos.
Por ahora, se siente solo un instrumento [de Dios] y animó a todos a seguir trabajando para que “la escuela siga creciendo y difundiendo el magisterio de la Iglesia, comprometiéndose en la búsqueda del bien común”.
Por más frutos
Para Juan Pablo Faúndez, presidente del Consejo académico, “nos vamos con el corazón lleno de alegría por haber anunciado la buena noticia del evangelio, el carisma, habiendo proclamado los fundamentos, los valores, los principios y la forma de concretar la misión de la Iglesia”.
Además apuesta para que “no se quede en una mera teoría” todo lo compartido con los participantes, por cuanto “ahora será el Señor quien, junto con las escuelas de líderes de esa zona, tendrá que seguir trabajando para que dé fruto a toda esta región”.
Andrés Soria vive en Pucallpa. fue uno de los jóvenes participantes de esta experiencia de formación. Expresó que fue una experiencia gratificante, porque “nos llevamos numerosas lecciones y aprendimos muchas cosas valiosas. Queremos expresar nuestro agradecimiento a cada uno de los maestros por compartir con nosotros tanto conocimiento durante estos días”.
La Academia Internacional de Líderes Católicos está presente en 40 diócesis de América Latina, Estados Unidos y España. Han formados más de 35 mil exalumnos mediante programas tanto presenciales como virtuales.
Por eso, a cuatro años de ‘Querida Amazonía’ cierran filas con Francisco para “dar testimonio de su compromiso constante con la formación integral y la difusión de la doctrina social de la Iglesia en diversas realidades pastorales”.
Foto: Academia de Líderes Católicos