El papa Francisco ha aceptado hoy la renuncia presentada por Ángel Fernández Collado como obispo de Albacete. El prelado, que llegó a la diócesis en 2018, ha comunicado este mediodía que se echa a un lado por motivos de salud. Por tanto, ahora la diócesis queda en sede vacante y el Pontífice tendrá que nombrar un nuevo mitrado próximamente.
- WHATSAPP: Sigue nuestro canal para recibir gratis la mejor información
- PODCAST: Luz consagrada entre las penumbras
- Regístrate en el boletín gratuito
“Libremente y después de una profunda reflexión he presentado mi renuncia por motivos de salud. Esta se ha quebrantado por las operaciones en los ojos y otras enfermedades que vengo sufriendo que han mermado mi capacidad de gobierno y pastoreo”, ha dicho en rueda de prensa el ya prelado emérito acompañado por gran parte del presbiterio.
Sin embargo, Fernández Collado ha señalado que seguirá en la diócesis hasta que acabe el curso pastoral, pues quiere seguir respondiendo a todos los compromisos como las confirmaciones de los jóvenes albaceteños. Eso sí, “ya sin gobernar”, como ha recalcado, puesto que, en los próximos días, el Colegio de Consultores deberá elegir a un administrador diocesano.
¿Quién es Ángel Fernández Collado?
Ángel Fernández Collado nació en Los Cerralbos (Toledo) el 30 de mayo de 1952. Cursó estudios eclesiásticos en el seminario mayor San Ildefonso de Toledo. Obtuvo el Bachillerato en Teología por la Facultad de Teología del Norte de España, sede de Burgos, en 1977. Este mismo año, el 10 de julio, fue ordenado sacerdote en la archidiócesis de Toledo.
Es licenciado (1984) y doctor en Historia de la Iglesia (1992) por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. También es Diplomado en Archivística por la Escuela Vaticana de Paleografía, Diplomática y Biblioteconomía (1984).
El papa Francisco lo nombró obispo auxiliar de Toledo el 28 de junio de 2013. Recibió la ordenación episcopal el 15 de septiembre del mismo año. El 25 de septiembre de 2018 se hacía público su nombramiento como obispo de Albacete, sede de la que tomó posesión el 17 de noviembre del mismo año.
En la Conferencia Episcopal Española es miembro de la Comisión Episcopal para la Liturgia.
