El Papa ha recibido en audiencia a los participantes en la Asamblea Plenaria de la Pontificia Comisión Bíblica
La enfermedad y el sufrimiento en la Biblia. Este es el tema sobre el que ha versado la Asamblea Plenaria de la Pontificia Comisión Bíblica, a la que el Papa ha recibido hoy en audiencia subrayando que es un tema que le toca “muy de cerca”, ya que “el sufrimiento y la enfermedad son adversarios que hay que afrontar”.
“Jesús no explica el sufrimiento, sino que se inclina hacia los que sufren. No aborda el dolor con estímulos genéricos y consuelos estériles, sino que acoge su drama y se deja tocar por él”, ha destacado Francisco. “La Sagrada Escritura es esclarecedora en este sentido: no nos deja un manual de buenas palabras ni un recetario de sentimientos, sino que nos muestra rostros, encuentros, historias concretas”.
En este sentido, ha destacado la palabra “inclusión”, la cual, aunque “no sea una palabra bíblica, expresa bien un rasgo destacado del estilo de Jesús: su búsqueda del pecador, del perdido, del marginado, del estigmatizado, para que sean acogidos en la casa del Padre”.
“Esta perspectiva de inclusión nos lleva a actitudes de compartir: Cristo, que pasó entre los hombres haciendo el bien y cuidando a los enfermos, mandó a sus discípulos cuidar de los enfermos y bendecirlos en su nombre, compartiendo con ellos su misión de consolación”, ha aseverado el Papa. “Por eso, a través de la experiencia del sufrimiento y de la enfermedad”, ha concluido, “nosotros, como Iglesia, estamos llamados a caminar junto con todos, en solidaridad cristiana y humana, abriendo, en nombre de la fragilidad común, espacios de diálogo y de esperanza”.