El cardenal Pedro Rubiano Sáenz, arzobispo emérito de Bogotá, falleció este 15 de abril a sus 91 años. Fue tres veces presidente del episcopado colombiano (1990, 1993 y 2022) y entre 2003 y 2007 ocupó la presidencia de asuntos económicos del Consejo Episcopal Latinoamericano.
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Fue en consistorio del 21 de febrero de 2001 cuando el entonces papa [san] Juan Pablo II lo creó cardenal con el título de la Transfiguración de Nuestro Señor Jesucristo vinculándolo a la Curia Romana en la Congregación para la educación católica y al Pontificio Consejo para los migrantes e itinerantes.
Participó en el cónclave de 2005 que eligió a su colega alemán Joseph Aloisius Ratzinger – Benedicto XVI – como el Papa 265.
El cardenal Luis José Rueda, actual titular y primado de Colombia, ha expresado sus condolencias a todo el clero, vida religiosa y a la comunidad arquidiocesana. Elevó sus oraciones por el eterno descanso del purpurado y “agradece a Dios por la vida y ministerio de este buen pastor y encomienda su alma al Dios de la vida”.
Del suroccidente de Colombia
El cardenal Rubiano nació Cartago, Valle del Cauca, suroccidente de Colombia, un 13 de noviembre de 1932. Fue el cuarto de seis hermanos del matrimonio de Pedro rubiano y Tulia Sáenz.
Ingresó al seminario de Popayán y luego viajó a Canadá para estudiar teología en la Universidad de Laval hasta que el 8 de julio de 1956 recibió la ordenación sacerdotal.
Cursó una especialización en catequesis en la Universidad Católica de Washington y de doctrina social de la Iglesia en el Ilades de Santiago de Chile. Como sacerdote fue capellán de la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez y de la escuela nacional Santa Librada.
También fue capellán de la clínica Nuestra Señora de los Remedios, mientras que, en Cali, fue vicario de pastoral de la arquidiócesis.
En 1971 fue nombrado y ordenado obispo de Cúcuta, llevando las riendas del gobierno pastoral de esta jurisdicción hasta 1983 cuando fue nombrado coadjutor de Cali. Dos años más tarde, en 1985, asume la titularidad de esta jurisdicción metropolitana.
El arzobispo del elefante
En 1994, fue nombrado arzobispo de Bogotá y primado de Colombia hasta que en 2010 renunció por límite de edad. Fue relevado por Rubén Salazar.
Se le recordará como el fundador del Banco Arquidiocesano de Alimentos, obra que ha beneficiado a millones de personas en sus más de 20 años de trabajo. También impulsó la creación de tres nuevas diócesis en Bogotá: Engativá, Fontibón y Soacha, constituidas por el papa Juan Pablo II en 2003.
También fue crítico del presidente Ernesto Samper con el famoso caso de los 8000, una investigación emprendida abierta al primer mandatario por recibir dinero del narcotráfico, por eso al purpurado se le ha acuñado la frase del “elefante”.
En referencia de lo que dijo a Samper de “si un elefante se mete en tu casa y no te enteras” por no darse cuenta de que a su campaña presidencial (1994) había ingresado financiación de la mafia.
Foto: Arquidiócesis de Bogotá