Desde el lunes 15 hasta el viernes 19 se está realizando la Asamblea Plenaria de los obispos de Chile en la precordillera de Santiago. El nuncio apostólico, Alberto Ortega Martin, participó en su inauguración y presidió la Eucaristía.
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En su homilía, el Nuncio llamó a los obispos a no perder de vista “lo que la gente verdaderamente necesita, y obrar de manera que no se pierda de vista que es lo más importante, cuál es el punto central de la misión de la Iglesia, que es el anuncio de Jesucristo”. Agregó que “tenemos que tener muy presente cuál es la respuesta a esa hambre profunda, a esa sed profunda del hombre, que es sed de verdad, de belleza, de felicidad, de sentido” cuya plena y verdadera respuesta viene de Dios y es Jesucristo.
Elección de directivos
En esta asamblea correspondía elegir integrantes de todos los cargos de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), para el período 2024 a 2027, excepto el Secretario General.
La reunión considera, además, el habitual análisis de la realidad nacional, conocer reacciones desde las diócesis al Sínodo sobre Sinodalidad, evaluar el trabajo de los organismos del Episcopado durante el período que concluye y proyectar lo que esperan los pastores como apoyo de la CECh para los próximos años.
Realizadas las elecciones, el Comité Permanente de la CECh quedó integrado por el arzobispo de La Serena, René Rebolledo, como presidente; el arzobispo de Antofagasta, Ignacio Ducasse, como vicepresidente; el obispo de Chillán, Sergio Pérez de Arce, como secretario general (su cargo se renueva el próximo año); el arzobispo de Santiago, Fernando Chomalí, y el obispo de San Bernardo, Juan Ignacio González.
Además, fueron elegidos integrantes de las Comisiones Pastoral, Doctrinal, de Administración, de Seminarios, de Derecho Canónico y Mixta con CONFERRE (la Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile).
En su intervención durante la primera sesión, el arzobispo de Santiago, Fernando Chomalí, llamó la atención sobre el complejo escenario mundial y latinoamericano actual, señalando que “las personas esperan mucho de nosotros”. Confesó que en los meses que lleva como arzobispo de Santiago y presidente del Episcopado ha sido invitado a conversar con diversos actores sociales, quienes han pedido un mayor liderazgo de los pastores católicos para acompañar los procesos que se están viviendo en Chile.
