Tras su paso por República Dominicana, el emérito de Ciudad Rodrigo reside ya en la Casa Diocesana y colaborará en la parroquia de la Divina Pastora
El obispo emérito de Ciudad Rodrigo, Raúl Berzosa, se ha trasladado a Málaga, donde residirá de forma temporal y colaborará en labores pastorales. Así lo ha confirmado ‘Vida Nueva’. Tras su paso por República Dominicana, Berzosa ha establecido su residencia en la Casa Diocesana. Se da además la circunstancia de que la ciudad andaluza se ha convertido en lugar de acogida para otros dos pastores ya jubilados: el arzobispo emérito de Pamplona, Francisco Pérez, y el obispo emérito de Málaga, Ramón Buxarrais.
Tras unas semanas de estancia en Madrid, Berzosa ya se ha establecido en Málaga. En concreto, colaborará en la parroquia de la Divina Pastora y Santa Teresa de Jesús, ubicada en el barrio de Capuchinos. Además, también está presidiendo la eucaristía en el convento de Santa Clara. Además, se da la circunstancia de que el obispo emérito de Ciudad Rodrigo también cuenta con familia en la ciudad.
De esta manera, Berzosa asume un nuevo destino después de que en 2019 el Papa aceptara su renuncia al gobierno de la diócesis castellanoleonesa. Tras un tiempo de retiro y una experiencia misionera en Bogotá, se instaló en Roma, donde estuvo colaborando con el Dicasterio para los Obispos. En octubre de 2020 hizo las maletas para viajar hasta República Dominicana. La arquidiócesis de Santo Domingo se convirtió en su hogar y parecía que este territorio eclesiástico estaba llamado a ser su lugar definitivo. Sin embargo, en febrero de este año ponía fin a lo que él mismo definió como una “rica y fecunda etapa misionera”.