La situación de esta región dependerá de evolución de las inundaciones en el sur de Brasil
Una vez más las inundaciones han hecho que las comunidades diocesanas se movilicen en torno a las regiones afectadas por la creciente del río Uruguay. En este caso, Cáritas de la diócesis de Concordia (provincia de Entre Ríos) activó un plan de acción para asistir a los damnificados.
La prioridad es conocer, exhaustivamente, las regiones anegadas y las necesidades de los pobladores que han sufrido pérdidas irreparables. Por tal motivo, el director del organismo diocesano, Pedro Sena, informó que se reunió el Comité Operativo de Emergencia (COE) para evaluar qué acciones iniciar en este momento en el que más de 500 personas necesitan asistencia y acompañamiento.
Los miembros del COE (referentes municipales, de las fuerzas de seguridad y de instituciones intermedias), conjuntamente a miembros de otros credos y de asociaciones benéficas, pretender realizar un relevamiento de las zonas, detectar las urgencias y redistribuir las tareas para llegar con efectividad, tiempo y recursos a los que más perjudicados.
Mientras tanto, la organización ha preparado y acondicionado distintos lugares para alojar y refugiar a los evacuados. Comunidades de más de seis parroquias están involucradas en esta adversidad. Toda la diócesis se encuentra en la tarea de recepcionar alimentos, elementos de limpieza, pañales, ropa de abrigo, colchones, y calzado. Las parroquias serán centros de acopio y recepción, para luego reenviar lo recibido a la sede de Cáritas para una efectiva distribución, según las necesidades de las familias.
Se conoció que, con este escenario, hay familias que se autoevacuaron, otras que fueron evacuadas y alojadas en centro y refugios y otras que se denominan evacuados ribereños, los cuales permanecen cerca de sus viviendas o alojados en los vagones de ferrocarril. Por tal motivo, el director de Cáritas diocesana pidió que las familias autoevacuadas se registren para poder recibir la asistencia durante este tiempo, y para acceder a la ayuda posterior que supone otro momento muy complejo por las consecuencias de esta catástrofe, que es el regreso al hogar.