La Conferencia Episcopal mueve ficha con las clarisas cismáticas: los obispos piden hablar con cada una de las monjas

Las clarisas de Belorado, en su horno

La Conferencia Episcopal Española mueve ficha ante el escándalo provocado por la decisión de las religiosas clarisas de Belorado y Orduña de abandonar la Iglesia católica y ponerse al amparo de Pablo de Rojas, excomulgado y autoproclamado obispo. Los obispos dan un paso al frente través de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada, el departamento que acompaña a las contemplativas españolas y presidido por el obispo de León y religioso claretiano, Luis Ángel de las Heras.



En la nota, que respalda la labor realizada hasta ahora del Arzobispado de Burgos y el Obispado de Vitoria, además de reafirmar “la adhesión de la Iglesia que peregrina en España al papa Francisco”. “Lamentamos profundamente la declaración de ruptura de la comunión con la Iglesia Católica contenida en la carta de la abadesa del Monasterio de Belorado y describen como “ofensivo y recriminatorio” utilizado hasta la fecha tanto en la carta cismática como en el documento de 70 páginas en el que se fundamenta.

Sedevacantistas

Sobre este llamado ‘Manifiesto Católico’, subraya los obispos que se corresponde “con el que propugnan aquellos que niegan la validez del Concilio Vaticano II y son denominados ‘sedevacantistas’”. “El texto parece inspirarse en los principios básicos de esta corriente y, concretamente, entronca con un grupo que es considerado una secta por varios expertos”, aprecian desde el Episcopado. La Conferencia Episcopal también abordan las intervenciones de las monjas en los medios de comunicación considerando que “abundan en expresiones confusas que parecen fruto de engaños”.

Ante esta encrucijada, la Conferencia da un paso más para solicitar que “cada hermana del Monasterio de Belorado y Orduña, en el ejercicio de su libertad de conciencia, pueda expresar su postura ante la decisión que comunica la abadesa”. “De hecho, el desarrollo de los acontecimientos sugiere que no todas las hermanas suscriben la “carta” de la abadesa”, añaden desde la Casa de la Iglesia, que piden a la comunidad que se habrá en “diálogo” lo mismo con obispos que con sacerdotes y religiosos “fieles a la verdad y en comunión con el papa Francisco”.

Noticias relacionadas
Compartir