El Papa ha reconocido hoy las virtudes heroicas del de Tomelloso, asesinado durante la Guerra Civil
El papa Francisco ha firmado este jueves el decreto que reconoce las virtudes heroicas del siervo de Dios Ismael Molinero Novillo (Ismael de Tomelloso), laico español asesinado en Zaragoza el 5 de mayo de 1938. Este reconocimiento llega 16 años después de que iniciase, el 5 de mayo de 2008, el proceso de beatificación y canonización de Ismael, a los setenta años de su muerte.
Nacido en 1917, en 1923 ingresó en el colegio de la Milagrosa de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl y Santa Luisa de Marillac (Tomelloso). En el año 1927 asistió a la escuela de Félix Pavón, en Tomelloso, y en 1931 abandonó el colegio y se puso a trabajar como dependiente de un comercio para ayudar a su familia.
En 1933 un amigo, Miguel Montañés, le invitó a visitar el centro de Acción Católica creado en Tomelloso, donde conoció al consiliario y fundador Bernabé Huertas Molina e ingresó en el grupo. Fue nombrado tesorero y vocal.
El 26 de julio de 1936 día de santa Ana, en Tomelloso los milicianos de izquierdas quemaron todas las imágenes de la iglesia. Ismael, escondido, consiguió salvar de la quema un pedazo del corbatín de la Acción Católica. Por miedo a las amenazas recibidas, su padre lo llevó a las lagunas de Ruidera junto a su hermano Luis.
El 18 de septiembre de 1937 fue movilizada la quinta de Ismael y lo trasladaron a Cuenca, donde el ejército republicano convirtió el seminario en cuartel. El 3 de febrero de 1938 comenzó la batalla del Alfambra y el 7 de febrero 1938 Ismael fue hecho prisionero.
Cuando lo interrogaron, no declaró que pertenecía a la Acción Católica, lo que le hubiera liberado la prisión. Enfermo de pulmonía, en febrero de 1938 Ismael fue trasladado al campo de prisioneros de San Gregorio en San Juan de Mozarrifar (Zaragoza). El 5 de mayo de 1938 falleció solo, en la cama del hospital como prisionero de guerra.