Francisco ha aprovechado su audiencia con Obras Misionales Pontificias para contar una anécdota en la que critica a esos cristianos que pretenden “convertir” a los demás en lugar de ser “ejemplo del amor de Dios”
El Papa ha recibido este sábado, en el Palacio Apostólico Vaticano, a los participantes en la Asamblea General de las Obras Misionales Pontificias. En su discurso, Francisco ha señalado que, “en vísperas de la Solemnidad de la Santísima Trinidad, entramos en la contemplación del misterio de Dios: misterio de amor que se ofrece, se entrega, se consume totalmente por la salvación de la humanidad”.
Así, ha señalado el Papa, “cuando contemplamos la Trinidad, vemos que Dios es comunión de personas, es misterio de amor”, y, desde esta perspectiva, “estamos llamados a vivir la espiritualidad de la comunión con Dios y con nuestros hermanos”. “La misión cristiana no se trata de transmitir alguna verdad abstracta o alguna convicción religiosa, menos proselitismo, sino que se trata ante todo de permitir que aquellos con quienes nos encontramos puedan tener la experiencia fundamental del amor de Dios, y podrán encuéntralo en nuestra vida y en la vida de la Iglesia seremos testigos luminosos de ello, reflejando un rayo del misterio trinitario”, ha expresado Francisco.
Sobre el proselitismo, de hecho, ha compartido una experiencia personal: “Cuando estaba en una de las Jornadas de la Juventud, al salir del teatro donde había habido una reunión, se acercó una señora que pertenecía a un grupo católico – ultra, demasiado ‘derechoso’– y la señora, con un niño y una niña y me dijo: ‘¡Santidad, quiero decirle que a estos dos los he convertido yo! ¡Los convertí!’. La miré a los ojos y le dije: ‘¿Y a ti quién te convertirá?'”. “Esta misión de conversión”, continuó el Papa, “hay grupos religiosos que llevan el catálogo de conversiones, y eso es muy malo”.
Por tanto, el Papa ha exhortado “a progresar en esta espiritualidad de comunión misionera, que es la base del camino sinodal de la Iglesia hoy”. “Lo reitero ahora también a vosotros, especialmente para vuestro proceso de renovación de los Estatutos. Por tanto, es necesario para todos un camino de conversión misionera y, por eso, es importante que haya oportunidades de formación personal y comunitaria para crecer en la dimensión de la espiritualidad misionera”, ha aseverado.
“Arraigados en la comunión trinitaria, estamos insertos en la obra creadora de Dios, que hace nuevas todas las cosas”, ha señalado Francisco, animando a hacer uso de “la creatividad”, la cual “está ligada a la libertad que Dios posee y nos da en Cristo y en el Espíritu”.
Por último, el Papa ha señalado la importancia de continuar con “tenacidad, constancia y perseverancia en el propósito y la acción”. “Podemos contemplar este rasgo también en el Amor de Dios Trinidad que, para realizar el plan de salvación, con fidelidad constante envió a sus servidores a lo largo de la historia y en la plenitud de los tiempos se entregó en Jesús“, ha subrayado.
Por tanto,” también nosotros estamos llamados a ser perseverantes y tenaces en nuestras intenciones y acciones. Y vivir también esta dimensión del martirio con nuestro ejemplo”. Y es que, como trabajadores de las Obras Misionales Pontificias, “entráis en contacto con realidades, situaciones y acontecimientos muy diferentes que forman parte del gran fluir de la vida de la Iglesia, en todos los continentes”.