Francisco recibió este 8 de junio al jefe de la Oficina de la Presidencia de Ucrania, Andriy Yermak
Solo unas horas antes de las elecciones europeas de este domingo y a unos días de que el Papa participe en la cumbre del G-7 que se celebrará en la ciudad italiana de Bríndisi, Francisco recibió, en la mañana del 8 de junio, al jefe de la Oficina de la Presidencia de Ucrania, Andriy Yermak, quien, de parte de Volódimir Zelenski, le agradeció el compromiso de la Santa Sede para repatriar a los niños que han sido deportados por la fuerza a la invasora Rusia.
A falta de una comunicación vaticana, parte de lo hablado en la audiencia fue desvelado por el propio Yermak, quien, a través de su cuenta de Twitter, destacó que “se prestó especial atención a la cuestión del retorno de los niños ucranianos deportados a la fuerza de nuestro país. Necesitamos un resultado, así que estamos haciendo todo lo posible para traer de vuelta a nuestros hijos”.
En este sentido, “el papa Francisco expresó su apoyo a Ucrania”. Y el ‘número 2’ de Zelenski, por su parte, mostró “un sincero agradecimiento a Su Santidad”. Del mismo modo, el representante político detalló que “también se trataron los preparativos de la Cumbre Mundial por la Paz que se celebrará en Suiza”. Se refiere a la cumbre multilateral que albergará la localidad helvética de Lucerna, del 15 al 16 de junio, y a la que Zelenski acudirá reclamando la restauración de la integridad territorial de Ucrania y la retirada de las tropas de Putin. Para Yermak, tal y como le explicó al Papa, esta ‘Fórmula de Paz’ es “el único camino para lograr una paz justa”.
Después de verse con el Papa, el representante ucraniano se encontró con el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado de la Santa Sede. Como también destacó en Twitter, ambos hablaron “de su participación en la Cumbre Mundial por la Paz y del papel de la Santa Sede en la aplicación de los puntos humanitarios de la Fórmula de la Paz”. En este punto, el purpurado “se mostró de acuerdo con la necesidad de mejorar el mecanismo de retorno de los niños y prisioneros de guerra ucranianos”.
En definitiva, la relación entre la Santa Sede y Ucrania se mantiene en el mismo punto que hace un año, cuando Zelenski visitó a Francisco en el Vaticano y ya expuso su ‘Fórmula de Paz’, en la que no entra, por ahora, ninguna cesión territorial ante la Rusia de Putin. Igualmente, pese a los numerosos momentos críticos vividos en Ucrania por declaraciones del Papa que se han sentido como “equidistantes”, el Ejecutivo no deja de valorar ese compromiso “humanitario” de la Iglesia a la hora de mediar para que niños ucranianos que fueron llevados por la fuerza a Rusia puedan regresar a su hogar.