Un decreto firmado por el primer ministro iraquí, Muhammad Shiaa al-Sudani, ha nombrado al cardenal iraquí Louis Raphael Sako Patriarca de la Iglesia caldea ‘en Iraq y en el mundo’, reconociéndole, así, como responsable último de los bienes y dotaciones de su Iglesia.
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El decreto, tal como recoge Fides, ha sido publicado en la página web de la Iglesia caldea, abre la puerta a superar la crisis de relaciones entre el Patriarcado caldeo y la dirección político-institucional de Irak que iniciaba en julio de 2023 y que llevaba al patriarca a abandonar Bagdad y trasladarse a Erbil.
Una decisión histórica
A nivel político, la marcha de Sako llegaba después de que el presidente de la República, Abdul Latif Rashid, revocase el decreto emitido en 2013 por el anterior jefe de Estado, Jalal Talabani, en el que la Administración reconocía al purpurado como patriarca de la Iglesia caldea.
Perdida esta condición desde el punto de vista institucional, el representante eclesial, aunque lamentaba entonces una decisión que “no tiene precedentes en la historia de Irak”, la aceptaba y, pese a lamentar “el silencio del Gobierno”, que se ha mantenido al margen de esta decisión de la Jefatura del Estado, optaba por salir de Bagdad.
