“Muy cerca vive gente en un país donde hay guerra, donde ya no hay justicia”, ha dicho Mieczysław Mokrzycki
El arzobispo de Leópolis, Mieczysław Mokrzycki, es pastor de la mayor archidiócesis latina de Ucrania. Con motivo de su visita a Roma estos días –donde ha acudido a la audiencia general–, ha concedido una entrevista a Vatican News acerca de la dramática situación de su país, bajo la agresión rusa desde febrero de 2022, y sobre el compromiso del Papa, de la Santa Sede y de la Iglesia universal para aliviar el sufrimiento del atormentado pueblo ucraniano y encontrar caminos de paz.
“Estamos muy agradecidos al papa Francisco, que no deja de hablar por la Ucrania mártir y cada miércoles, cada domingo después del Ángelus, siempre menciona a nuestro país e invita siempre a todo el mundo, de manera especial a la Iglesia católica, a orar”, ha asegurado el obispo. Ha subrayado, además, su agradecimiento por el hecho de que esté “predicando con el ejemplo enviando mucha ayuda”.
En estos días, ha adelantado, el cardenal Konrad Krajewski, limosnero del Papa, “regresará a Ucrania con una ambulancia y el miércoles próximo bendecirá un centro de rehabilitación en la diócesis de Kam”janec’-Podil’s’kyj”.
Otro signo de cercanía, ha apuntado, es la próxima visita a Ucrania del cardenal secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, que tendrá lugar el próximo 21 de julio. “Este es un signo muy fuerte de cercanía de la Santa Sede, del Papa Francisco, de la Iglesia católica con nosotros, los ucranianos, con la Iglesia católica en Ucrania”, ha asegurado Mokrzycki.
Asimismo, el obispo ha pedido a Europa que no sea indiferente: “no debemos olvidar que a nuestro lado vive gente en un país donde hay guerra, donde ya no hay justicia, y que otros no tienen derecho a quitarnos esa dignidad, a quitarnos la derecho a tener una nación”.
Y, en cuanto a la acogida de los que han huido del país, ha recordado las palabras de Jesús: “Fui forastero, estuve en la cárcel y me disteis de comer, me visitasteis, me acogisteis”. “Éste es nuestro compromiso cristiano y también humano”, ha insistido. “Siempre debemos ser solidarios, no debemos fingir que no vemos las cosas que hay al lado de nuestra puerta”.