Ya no hay vuelta atrás. El arzobispo de Burgos y comisario pontificio, Mario Iceta, ha declarado hoy la excomunión de las diez clarisas de Belorado, después de que las religiosas mandaran ayer un burofax en el que negaban a presentarse ante el Tribunal Eclesiástico para dar cuenta de su decisión de abandonar la Iglesia católica el pasado 10 de mayo a través del llamado Manifiesto católico que firmó la ya ex abadesa, sor Isabel de la Trinidad.
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A través de un comunicado, el Arzobispado explica que esta declaración de “separación voluntaria” ha llevado a Iceta, como comisario pontificio y representante legal de los monasterios de Belorado, Orduña y Derio, a comunicar “el decreto de declaración de excomunión y la declaración de dimisión (expulsión) ipso facto de la vida consagrada a todas y cada una de las diez hermanas que han incurrido en cisma”.
Las monjas ‘validas’
El comunicado del Arzobispado niega que el convento se vaya a cerrar en tanto que sí que existiría una comunidad monástica ‘auténtica’ que estaría “formada por las hermanas que no han incurrido en excomunión, al no haber secundado el cisma”. Se trataría de las cinco hermanas mayores y otras tres hermanas que, aunque en este momento no se encuentran en el monasterio, pertenecen a la comunidad al estar incardinadas en ella. Entre ellas, se incluye, sor María Amparo, que huyó tras negarse a ponerse bajo el amparo del falso obispo excomulgado Pablo de Rojas y la llamada Pía Unión San Pablo Apóstol.
En la nota del equipo de Mario Iceta, se explicita que han sido las hermanas quienes “han mostrado su decisión libre y personal de abandonar la Iglesia Católica”. A la par, se deja la puerta abierta a que las monjas díscolas regresen, al estilo del “hijo pródigo”: “Es una acción jurídica considerada por la Iglesia como una medida medicinal, que mueva a la reflexión y a la conversión personal”.
Desde la Archidiócesis de Burgos se relata además que “las hermanas mayores siguen siendo una prioridad en nuestras preocupaciones”. “La Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu ha previsto la forma de atender de modo inmediato a estas hermanas en el mismo Monasterio de Belorado, desplazando para habitar en el monasterio a algunas hermanas procedentes de otros monasterios de la Federación”, remata el comunicado .