La provincia de san Juan de Sahagún celebra su segundo capítulo provincial y aprueba su plan estratégico para el próximo cuatrienio
La imponente Residencia Fray Luis de León, en Guadarrama (Madrid), acogió desde el 8 al 12 de julio el 2° Capítulo provincial ordinario de la provincia de san Juan de Sahagún de los agustinos. Una asamblea formada por 63 capitulares procedentes de Tanzania, República Dominicana, Perú, India, Panamá, Venezuela, Nicaragua, Argentina, Malta y España; a los que hay que sumar dos religiosos invitados por el Prior Provincial y otros dos para trabajos de traducción.
El capítulo, principalmente, ha tenido que aprobar el programa provincial para el siguiente cuatrienio y reformar los estatutos de la provincia agustiniana. El prior general de la orden, Alejandro Moral, que confirmó en el cargo al provincial, Domingo Amigo y a su nuevo consejo, fue el encargado de abrir el capítulo con la celebración de la eucaristía del Espíritu Santo. “Ante nosotros, igual que ante los discípulos, se abre un camino de zozobras, de pasos poco claros”, señaló en la homilía el superior general que invitó a todos los religiosos “a consolar a los demás sabiendo que también nos faltará muchísimo consuelo”, según la crónica oficial del capítulo.
El su discurso programático, titulado “Comunión, fraternidad y misión”, el provincial invitó a los religiosos “a fortalecer la fraternidad y la misión compartida, promoviendo una espiritualidad sinodal y colaborativa”. Por ello marcó como prioridades la formación de los laicos en la espiritualidad agustiniana, la revisión de las obras, la pastoral juvenil y vocacional o la administración económica.
A lo largo de la semana se discutieron distintos documentos y propuestas llegadas desde las diferentes realidades de la provincia. El provincial, Domingo Amigo, en la misa de clausura invitó a todos los hermanos presentes a caminar juntos, como se ha hecho a lo largo de los días capitulares para afrontar los desafíos y dificultades. En concreto, los capitulares han votado a favor de mantener la formación de los agustinos en Valladolid, la independencia de Panamá como provincia, la aprobación del nuevo programa de formación de laicos y el compromiso de trazar las claves para una parroquia sinodal. El general, Alejandro Moral, animó a todos a llevar adelante las resoluciones capitulares y a vivir con fidelidad y alegría esta nueva etapa provincial.