El arzobispo de Oviedo reacciona a través de redes sociales a la nueva delegada del Gobierno en Asturias que le acusa de “despectivo y ultraderechista”
El aterrizaje de Adriana Lastra como delegada del Gobierno en Asturias está resultando algo accidentada. Al menos, desde el punto de vista eclesial. La que fuera vicesecretaria general del PSOE, ha dado sus primeros pasos acusando al arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz de ser portavoz de un discurso “profundamente despectivo, de confrontación, profundamente político y ultraderechista” durante sus homilías en la misa que preside cada 8 de septiembre en el Santuario de Covadonga con motivo del Día de Asturias. Así se manifestó Lastra ayer, después de mantener una reunión con el presidente de la Junta de Asturias, Juan Cofiño.
Jesús Sanz ha reaccionado a través de cuenta de la red X. “Viene la seño con consignas. Marcando el paso desde su ideología”, expone sin mencionar explícitamente a Lastra. Sin embargo, resulta sencillo deducir quién es su destinataria, máxime teniendo en cuenta que el pastor no se prodigaba en esta red social desde hace justo un mes cuando dejó un comentario referente a las clarisas cismáticas de Belorado.
En su posteo, el arzobispo franciscano comenta, en relación a la nueva delegada del Gobierno, que resulta “atrevida” la “ignorancia que impone temas, censuras, amenazas y agenda”. Incluso deja caer que da “lecciones quien puede no quien quiere”. Y, a modo de declaración de intenciones, expone que “amo demasiado la libertad, esa que se deriva de la Verdad, como para encogerme ante etiquetas sincronizadas”.
Lastra lanzó el ataque contra el arzobispo, a la vez que señaló que tiene previsto mantener un encuentro con Sanz dentro de la ronda de reuniones institucionales vinculadas a su nuevo cometido. “Lo que tiene que valorar es si lo que pretende es que la mayoría de los asturianos no se sientan representados ese día. Espero que recapacite”, señaló la política socialista sobre el prelado. A la par no desveló si participará en los actos religiosos del 8 de septiembre, planteando que “intentará” ir allí donde sea invitada. Eso sí, determinó que “no voy a ir a donde sepa de una manera anticipada que no se nos va a insultar a la mayoría de los asturianos y españoles”.