El cardenal venezolano, Diego Padrón, está convencido de que “la opción preferencial por los pobres no es una posición de la Iglesia en un momento determinado, la opción preferencial por los pobres la hace Dios”. Así lo manifestó esta mañana, durante su ponencia en el IX Diplomado sobre Doctrina Social de la Iglesia organizado por la Academia de Líderes Católicos. Esta propuesta formativa tiene lugar a lo largo de esta semana en la Saint John’s University de Nueva York, en colaboración con ‘Vida Nueva’.
- WHATSAPP: Sigue nuestro canal para recibir gratis la mejor información
- PODCAST: Los goles al estilo ‘Fratelli tutti’
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
“Hoy por hoy, tenemos más pobres que antes”, lamentó el arzobispo emérito de Cumaná y ex presidente del Episcopado de Venezuela. A lo largo de su alocución, el purpurado ahondó en las diferentes acepciones del concepto de pobre, desde su matiz espiritual a su mirada medioambiental.
Desarrollo integral
“Se han propuesto diversas teorías y enfoques a lo largo de muchas décadas sobre cómo luchar contra la pobreza, con dos enfoques: el punto de vista capitalista y el punto de vista humano”, explicó. Padrón se decantó por afrontar la realidad de los empobrecidos desde lo que la Iglesia denomina el “desarrollo humano integral”.
“Ya antes de los años 90, con Pablo VI y la ‘Populorum Progressio’, la Iglesia venía hablando del desarrollo humano integral, pero no se había puesto especialmente de relieve como está sucediendo ahora”, enfatizó, subrayando al paso algunos de los hitos papales en estas décadas. “A Montini -compartió- le sacudió su viaje a la India y su presencia en Colombia. La encíclica no hace como una teoría, sino como una expresión de lo que él había vivido, de su encuentro con la pobreza”. Deteniéndose en Papa Francisco, el cardenal apuntó que “basta que ver su exhortación programática ‘Evangelii Gaudium’ para constatar su preocupación y su prioridad por acabar con la pobreza”.
El cardenal Diego Padrón, en el Diplomado de la Academia de Líderes Católicos
Para pasar del asistencialismo con los empobrecidos a una subsidiariedad real, Padrón reflexionó sobre la importante de otorgar dignidad a los seres humanos, para que no sean objetivos, sino sujetos y protagonistas de su propio desarrollo: “El pobre tiene dignidad, capacidades y su propio lugar en la historia, cuando siemplemente damos una ayuda o un subsidio estamos perpetuando su pobreza”.
